Palenque, Chis., La construcción del Tren Maya será complementada con un programa especial de recuperación de sitios arqueológicos en la zona de influencia de esta obra, anunció el presidente Andrés Manuel López Obrador. Se trata de proteger, engrandecer y difundir la belleza de las antiguas ciudades mayas, pues hay un gran potencial de la riqueza arqueológica de la región, por lo que, con la participación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se diseñará este plan de recuperación.

La secretaria ejecutiva del INAH Aída Castilleja sostuvo que a partir de las investigaciones que han realizado en cooperación con el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) –instancia coordinadora del Tren Maya– se tiene considerada la apertura de entre tres o cuatro zonas arqueológicas más en el área que abarca el proyecto.

Tras recordar que el sureste del país tiene al menos cinco sitios inscritos como patrimonio mundial –Chichén Itza, Uxmal, Calakmul, Palenque y la ciudad fortificada de Campeche–, señaló que derivado de los trabajos iniciales asociados a la obra, se identificaron mil 773 sitios con vestigios arqueológicos de diversas dimensiones a lo largo de la ruta.

Al iniciar una gira por la ruta del Tren Maya, el Presidente llegó a Villahermosa –para trasladarse a Palenque–, donde fue abordado por damnificados de las inundaciones que le demandaron apoyo y a quienes ofreció acciones del gobierno federal. Ya en Palenque abrió un espacio en su intervención para anunciar un plan de apoyo a 30 mil viviendas afectadas, previo censo de la Secretaría del Bienestar y de la Sedatu, tanto para reparar los daños como para reponer los enseres domésticos perdidos.

López Obrador adelantó que la próxima semana visitará Tabasco y en especial supervisará la presa Peñitas pues, insistió, las inundaciones en su tierra no obedecen solamente a las intensas lluvias, sino a malos manejos en la operación de las presas en aras de no afectar intereses de empresas privadas generadoras de energía.

▲ El mandatario Andrés Manuel López Obrador encabezó la supervisión de obra del Tren Maya, tramo 1, que va de Palenque a Escárcega.Foto Presidencia

Subrayó que a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) se le impide turbinar en las presas para operar la hidroeléctrica con tal de no competir con la empresa privada.

Son inercias que se quedaron para no afectar a los particulares que le venden energía a la CFE. El domingo que regrese vamos a tomar decisiones. Nunca más se va a poner en riesgo a la población.

Al iniciar su gira de supervisión en el primer tramo del Tren Maya –donde invertirán más de 15 mil millones de pesos–, López Obrador destacó que es una obra que deberá quedar terminada en esta administración. Uno de los problemas que tenemos que superar es que no nos gane el tiempo, porque esta obra la tenemos que terminar a más tardar en 2023. Todo el Tren Maya, por eso no podemos perder el tiempo. Si es necesario voy a estar cada mes en los frentes de trabajo.

Considerado uno los proyectos emblemáticos de su administración, el Tren Maya, dijo, forma parte de los nuevos tiempos que priorizan la inversión en esta zona del país. Es reivindicar el sureste que había estado abandonado desde hace mucho tiempo. Nunca se había invertido tanto aquí como ahora. Si dejaron sin privatizar el tren del sureste es porque no les importaba el sureste ni siquiera para robar, tenían en abandono esta región.

Por su parte, Rogelio Jimenez Ponds, titular de Fonatur y coordinador del Tren Maya, señaló que otra vertiente es la protección del medio ambiente. Este proyecto no sólo remediará los impactos negativos del pasado, sino que fomentará un modelo de movilidad sustentable, compensará las emisiones contaminantes de los vehículos motorizados y dará el programa de paso de fauna más ambicioso de la historia, dijo.