▲ El gobierno italiano suavizó ayer las severas leyes antimigrantes adoptadas hace más de un año por el entonces ministro del Interior Matteo Salvini, líder de extrema derecha. Este político hizo de la represión a los indocumentados su prioridad. Proclamó la política de puertas cerradas y puso fin a los permisos de estadía de dos años por protección humanitaria. Las sanciones contra barcos de las ONG que brindan auxilio en el Mediterráneo (imagen de archivo en la isla de Lampedusa con migrantes rescatados) eran muy fuertes; las embarcaciones podían ser confiscadas y los capitanes se arriesgaban a una multa que podía ser hasta de un millón de euros. Si los grupos de rescate respetan la ley marítima ya no serán penalizados.Foto Ap