De las experiencias increíbles vividas en el Abierto de Francia, Renata Zarazúa destacó la energía que sintió por el apoyo de miles de mexicanos aun sin público en el estadio principal de Roland Garros y se queda simplemente con la creencia, un poquito más, de que podemos lograr cosas grandes.

La tenista hizo historia el pasado 30 de septiembre, el día de su cumpleaños 23, al convertirse en la primera mexicana en llegar al cuadro principal de un Grand Slam en 20 años, después de que en 2000 Angélica Gavaldón jugó el Abierto de Australia. Lo logró ganando tres partidos en el torneo de calificación y tras librar la primera ronda, perdió en la segunda haciendo sufrir a la ucraniana Elina Svitolina, a quien blanqueó en el segundo set.

Fueron experiencias increíbles. Me siento muy contenta, porque era algo que sabía que algún día podría lograr, y ahora lo más importante es seguir con los pies en la tierra, afirmó la capitalina en videoconferencia desde casa de su madre en Mérida, donde hará una base de entrenamiento.

La tenista no se cansó de agradecer el apoyo que le manifestaron miles de personas en redes sociales desde que calificó al cuadro principal, logro precedido por un título en un torneo WTA, en Praga, y un campamento de preparación en Nia, en la academia de Patrick Mouratoglou, entrenador de la estadunidense Serena Williams.

Y antes de eso, la hazaña de haber llegado a semifinales en el Abierto de Acapulco este año y la frustración de no poder competir durante seis largos meses por la pandemia, frente a lo cual, destacó que fue clave la asesoría de su hermano y entrenador, Patricio, además de los consejos sostenidos de su referente, su tío abuelo Vicente Zarazúa, gloria del tenis mexicano en la década de 1960.

Renata compartió que en Roland Garros se percató de fortalezas y carencias. Tengo que mejorar la consistencia de mis golpes, prepararme lo mejor posible para (Abierto de) Australia, porque sé que en algún momento llegaré más lejos.

Ante la posibilidad de competir en los Juegos Olímpicos de Tokio el año próximo, confió en calificar de manera directa ingresando al top-100 del ranking mundial, en el que ascenderá, del sitio 178 antes del Abierto, al 145 la próxima semana.