Chilpancingo, Gro., Padres de familia de los 43 estudiantes desaparecidos de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos y alumnos de ese plantel marcharon este domingo para recordar el asesinato de sus compañeros Filemón Tacuba Castro y Jonathan Morales Hernández.

El 4 de octubre de 2016, cuando Filemón y Jonathan regresaban de realizar prácticas, abordaron una camioneta de transporte público con rumbo a la carretera que va a Tixtla, y a unos dos kilómetros de la salida de Chilpancingo, un comando los bajó y ejecutó a balazos. El gobierno estatal, que encabeza el perredista Héctor Astudillo Flores, dijo en esa ocasión que estos homicidios fueron resultado de un asalto, según las pesquisas realizadas.

Ayer, los contingentes de inconformes se concentraron en el antimonumento a los 43 normalistas ausentes, ubicado en Chilpancingo, y posteriormente se trasladaron al libramiento a Tixtla. Depositaron coronas florales en las dos cruces instaladas en el lugar por los asesinados y demandaron a los gobiernos federal y estatal que investiguen quiénes fueron los autores intelectuales y materiales del doble crimen.

Entrevistado durante la marcha, Melitón Ortega, vocero de los padres de familia, destacó que se dio muerte a los dos estudiantes al momento que volvían de sus prácticas docentes, como corresponde a los alumnos que están en el último año de su carrera.

Consideró que con los asesinatos de Filemón y Jonathan se pretendió detener el movimiento por la presentación de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, que en ese año (2016) estaba en plena efervescencia, tanto a nivel estatal, nacional y también en varias ciudades del mundo.