Se impide transformación del país: Experto
Mala señal, reducir presupuesto a normales
Martes 22 de septiembre de 2020, p. 8
La recurrente disminución del presupuesto a los programas de cambio y transformación de las escuelas normales y en la capacitación de nuevos docentes es inaceptable
y una mala señal
para la tarea de reconversión del país, consideró Manuel Gil Antón, académico e investigador de El Colegio de México.
Criticó la decisión del Ejecutivo federal de proponer en su proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2021 una inédi-ta reducción de 95 por ciento de los recursos a la Dirección General de Educación Superior para Profesionales de la Educación (DGESPE), convertida hoy en Educación Superior para el Magisterio, instancia que entre sus atribuciones tiene la de proponer políticas para el desarrollo de las instituciones y programas dirigidos a la preparación de docentes.
Las normales tendrán presupuesto para poder operar, pagar la luz, la nómina y sus servicios, pero no habrá recursos para impulsar los proyectos de renovación, sobre todo los que daban soporte financiero a los acuerdos alcanzados en un gran Congreso Nacional de Normales que se realizó el año pasado, y que el mismo gobierno suscribió
, señaló el especialista.
Hay que recordar que el PEF 2021 propone otorgarle a la anterior DGESPE un monto de 20.6 millones de pesos, que representa un decremento de 95.3 por ciento respecto a los poco más de 462 millones de pesos que se ejercen el presente año.
Ya varios directores de escuelas normales de diversas entidades del país han expresado de manera pública que de concretarse este recorte, se verían afectados la formación de docentes, la operatividad de los planteles y el mantenimiento, así como los planes de estudio e intercambios estudiantiles.
En entrevista, Gil Antón, especialista en temas educativos y miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), consideró que esta propuesta de reducción presupuestal es contradictoria
, por decir lo menos, pues el discurso oficial ha sido la de rescatar la estima social
del magisterio y de las escuelas normales.
“De tal manera que si seguimos la idea de que ‘donde pones el dinero está tu corazón’, entonces esta reducción es una mala señal, es un mensaje contradictorio y algo que desanima. Es cierto, las normales no sólo requieren dinero. También hay que reconocer de manera autocrítica que es necesario cambiar muchas cosas, pero el presupuesto ayuda mucho, sin duda”, sostuvo Gil Antón.
Esta propuesta de presupuesto seguramente tendrá y esperamos que tenga cambios, pero lo que desconcierta y desanima es por qué lo mandaron así desde el Ejecuti-vo
, cuestionó.