Cuernavaca, Mor., El Servicio de Protección Federal (SPF) prepara y especializa a policías en seguridad minera debido al asedio de grupos criminales en las 475 minas que operan en el país, anunció el comisionado de la SPF, Manuel Espino Barrientos.

El proyecto inicia en un mes y las primeras minas a cuidar serán una de Guerrero y una en Caborca, Sonora, explicó el funcionario federal tras acudir el viernes con el gobernador Cuauhtémoc Blanco a la firma del convenio de colaboración para el reclutamiento de aspirantes.

No teníamos la especialidad de seguridad minera; hay 475 minas en el país que aportan cerca del 5 por ciento del producto interno bruto y en este momento padecen un asedio muy fuerte, comentó.

Las minas, ustedes saben, están instaladas en lugares muy remotos, aislados y susceptibles de ser asediados por grupos criminales, agregó Espino Barrientos.

En la primera etapa de seguridad a las minas del país, dijo que ya se especializan en Durango alrededor de 150 policías.

Los seleccionamos de entre los elementos con más experiencia para enviarlos a un curso de especialización en seguridad minera, y concluirán su capacitación en unas semanas para comenzar su tarea, refirió en su discurso.

En entrevista, Espino Barrientos explicó que este proyecto es una nueva especialización ante la emergencia que viven los complejos mineros y la población que ahí trabaja o vive cerca.

Hay sectores que se han hecho sensibles ante el incremento de la delincuencia organizada, como son aeropuertos, puertos, carreteras, y ahora las minas, entonces esa tarea de resguardo la estamos asumiendo en Protección Federal, precisó.

–¿Grupos criminales ya se apoderaron de alguna mina en el país? –se le preguntó.

–Yo no diría que se hayan hecho de las minas, pero sí ha habido problemas de secuestros y asesinatos.

–¿Quién está pidiendo la seguridad para las minas, los empresarios, los trabajadores o los pueblos?

–La piden las instituciones o las empresas para cuidar a los funcionarios, a los empleados y los ciudadanos que acuden a un servicio o una gestión en esas labores.

Por estos servicios, que en su mayoría antes cubrían elementos de seguridad privada, según Espino Barrientos, las instituciones públicas se ahorrarán alrededor de 2 mil millones de pesos.

Señaló que las empresas privadas no tienen personal capacitado o que haya pasado una evaluación de control o confianza, o bien reclutaron policías despedidos de corporaciones municipales o estatales.