La agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), reconoció el trabajo de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar) tras la detención de Raymundo Montoya-López, Abraham Alfonso García-Montoya y Felizardo Díaz-Hernández, quienes fueron aprehendidos en costas de Quintana Roo el pasado 1º de septiembre por marinos mexicanos cuando transportaban casi 3 toneladas de cocaína en una embarcación menor.

Tras la aprehensión, las autoridades estadunidenses formalizaron una acusación contra los tres narcotraficantes ante una corte de Nueva York, de manera independiente del juicio que se les instauró en México. Raymond P. Donovan, agente especial de la DEA, externó que “las fuerzas del orden frustraron los planes de los cárteles de saturar el mercado de drogas estadunidense con cocaína al interceptar más de 3 toneladas de esta droga.

Esta operación internacional de aplicación de la ley ha salvado vidas y ha vuelto a enfatizar el compromiso de las fuerzas del orden de mantener a Estados Unidos a salvo del tráfico, el abuso de drogas y los delitos violentos”.

Las autoridades estadunidenses refirieron que los esfuerzos combinados de las fuerzas del orden público federales, estatales y locales, junto con las autoridades de México, han dejado esta operación fuera de servicio y han interrumpido el transporte de miles de kilos de cocaína a nuestras calles.