La mayoría, de América Central
En estancia irregular en ese mes, 4 mil 870 extranjeros, más del doble que en mayo y junio
Domingo 30 de agosto de 2020, p. 13
Con todo y el cierre de fronteras en países de América Central y del Sur ante la expansión del coronavirus, el flujo migratorio en México empezó a retomar su dinámica. En julio pasado, el Instituto Nacional de Migración (INM) registró 4 mil 870 extranjeros en presunta estancia irregular, poco más del doble que en los dos meses anteriores.
Si bien los números todavía son muy bajos en comparación con los de 2019, cuando se alcanzaron picos mensuales de hasta 30 mil 971 migrantes presentados ante la autoridad, con un piso mínimo de 7 mil (en diciembre), en el séptimo mes de este año se retoma la tendencia al alza de este tránsito.
Datos oficiales señalan que de enero a julio de 2020 fueron presentados ante el INM 43 mil 306 personas, la mayoría (38 mil 623) procedentes de Centroamérica. Este año el mínimo fue en mayo, con 2 mil 268 registros, y el máximo en enero, con 14 mil 129.
Otro dato distinto a la situación del año pasado es el porcentaje de repatriación, pues de 43 mil 306 presentados, se devolvieron a 31 mil 722, esto es, 73 por ciento, un nivel inferior al de periodos anteriores.
Los migrantes originarios de los tres países del Triángulo Norte de Centroamérica (Honduras, Guatemala y El Salvador) integran 90 por ciento del reporte de personas en situación administrativa irregular, de acuerdo con el INM.
Cierre inútil
En tanto, en un foro convocado por la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, el director general de Promoción de la Salud de la Secretaría de Salud, Ricardo Cortés, aseguró que el cierre de fronteras que aplicaron las naciones no fue útil
y, además, va en contra del reglamento sanitario internacional.
En compañía de otros especialistas de la región, advirtió que no habrá en el corto plazo, es decir, en dos o tres meses, un tratamiento o vacuna para disminuir los contagios de Covid-19. Y aunque quizá en seis u ocho meses ya estén disponibles, faltará un tramo para su diseminación entre la población, no para eliminar el problema, sino para reducir los casos o lograr que éstos no sean graves.
Lamentó que la pandemia vuelva más vulnerables a los grupos que ya de por sí lo son, como los migrantes. De ahí que cerrar fronteras fue una acción incorrecta, porque al momento la única vía para atajar la emergencia sanitaria es reducir la carga en el sector salud y fortalecer la vigilancia epidemiológica.
Añadió que los rebrotes son esperados, por lo cual reiteró el llamado a la población a reducir la actividad social y económica en la medida de lo posible.