Directores y profesores de educación básica señalaron que durante la primera semana del regreso a clases del ciclo 2020-2021, se detectaron las brechas de conectividad y acceso a la tecnología que enfrentan muchos hogares y padres de familia, pero también el entusiasmo y el interés que tienen por apoyar las actividades escolares de sus hijos, aunque sea desde la oficina o por las noches.

Destacaron que en promedio se reportó hasta 80 por ciento de los estudiantes inscritos, mientras el restante 20 por ciento, dijeron, son los alumnos con los que no hemos podido establecer contacto, y a quienes seguimos rastreando. De acuerdo con datos de la Secretaría de Educación Pública, se estima que al menos 10 por ciento de los alumnos de educación básica desertó en el ciclo escolar pasado, es decir, 2.5 millones de estudiantes.

Directores de escuelas primarias de la Ciudad de México indicaron que la semana próxima continuarán con la elaboración de los diagnósticos para detectar a los menores con mayor riesgo de abandonar las aulas o quienes debieron cambiar de escuela porque la familia tuvo que irse a otro estado o porque se han mudado a otra alcaldía.

Profesores frente a grupo indicaron que vimos mucho entusiasmo de niños y padres de familia. Fue evidente que se necesitaba ese contacto directo y para lograrlo echamos mano de todo lo posible. En algunas escuelas, indicaron, se logró trabajar en plataformas digitales, mientras en otras nos comunicamos por videoconferencia, y en algunos casos, a través de chat o con llamadas directas a cada alumno.

Los educadores destacaron que una de las demandas más insistentes por parte de los padres de familia es que no se caiga en la saturación de actividades y tareas, como lo que se experimentó al cierre del ciclo escolar pasado, y han sido muy claros en señalar que quieren algún contacto con el maestro y los alumnos, no sólo que su hijo vea la televisión.

Directores y maestros destacaron que, previo al inicio de clases a distancia, hubo un enorme esfuerzo de coordinación y trabajo de cada una de las comunidades escolares, que en su mayoría comenzamos a buscar el contacto con padres de familia mucho antes del 24 de agosto; de no hacerlo, hubiera sido imposible iniciar con clases en vivo o con videollamadas desde este lunes.