Sábado 29 de agosto de 2020, p. 6
Aunque por la mañana pidió a la gente no asistir a los actos que encabeza para evitar el riesgo de contagio por coronavirus, cientos de personas desoyeron el llamado del presidente Andrés Manuel López Obrador y se presentaron en la inauguración de obras de mejoramiento urbano en Reynosa, Tamaulipas.
Con todo y la advertencia de que los dirigentes serían irresponsables si no hicieran caso porque, además, mostrarían que están contra su gobierno, los pobladores y sus líderes llegaron al sitio, por lo cual el mandatario, como un día antes en Matamoros, emitió un mensaje de escasos seis minutos: Me da mucho gusto estar con ustedes; no le hace que no me hayan hecho caso, porque no queremos que haya congregación, que haya mítines, porque tenemos que cuidarnos con sana distancia para no enfermarnos, para no contagiarnos de esa terrible enfermedad, de esa pandemia del Covid; tenemos que cuidarnos mucho
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Desde la conferencia de prensa matutina, el mandatario dejó en claro que si querían ir estaban en toda libertad, pero les insistió que no eran tiempos de campaña.
De nuevo no se logró guardar la sana distancia y el Presidente admitió que, ante la pandemia, el hecho es muy riesgoso. Tampoco valió la súplica de que se quedaran en sus casas, que ya vendrían otros tiempos para abrazarse y tomarse fotos.
El jueves acudieron al acto cientos de personas con banderines de Morena, y ayer destacaron los simpatizantes del gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca.