El ex alcalde de Iguala José Luis Abarca y su esposa, María de los Ángeles Pineda Villa, enfrentan diversas causas penales y por lo que se refiere a la acusación por delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita, se cumplirá con la información que se solicita, relacionada con los testigos que los incriminan, señalaron autoridades federales, luego de que un tribunal decretó que se debe realizar nuevamente la audiencia de auto de formal prisión.

La pareja, señalada de tener vínculos con el cártel Guerreros Unidos, no ha sido imputada como responsable de haber ordenado o dirigido la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

Funcionarios federales señalaron que el Ministerio Público cumplirá la sentencia de que se reponga el proceso hasta la etapa de la declaración preparatoria y se resuelva de nueva cuenta si se debe dictar auto de formal prisión o de libertad.

Las autoridades consultadas refirieron que para evitar que se considere que existieron violaciones al debido proceso, se entregará la información de los testigos que declararon contra ambos.

Los entrevistados mencionaron que no existe el riesgo de que ambos acusados obtengan su libertad, y en el caso del ex alcalde ya enfrenta procesos penales por homicidio.