La decisión de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de reducir la edad y años de servicio para la jubilación de sus trabajadores sindicalizados establece un régimen de privilegios y pone en riesgo la viabilidad financiera de la empresa productiva del Estado, advirtió ayer la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

En su mensaje semanal, el organismo patronal destacó que esa determinación, que provocará que haya trabajadores de primera y de segunda, se da justo cuando se están discutiendo los términos de una profunda reforma pensionaria, en la cual los patrones aportan más recursos para el retiro de los empleados y el gobierno no.

En ese contexto, sostuvo, la CFE aceptó modificar el contrato para establecer una pensión desproporcionada. “Con esa medida el gobierno establecería de facto una distinción perversa que dividiría a los trabajadores mexicanos en empleados de primera y de segunda categoría”.

En las nuevas medidas de la CFE destacan los años de servicio y edad. Ahora las mujeres podrán jubilarse con 25 años de servicio sin importar la edad, y para los hombres se establecen 25 y 55 de edad, o bien 30 de trabajo sin importar la edad.

Con esa pensión de privilegio el gobierno intenta congraciarse con los trabajadores eléctricos en una clara acción política con fines electorales, sin importarle garantizar justicia pensionaria a los miles de mexicanos de a pie que se jubilan al llegar a 65 años, subrayó la Coparmex.

El gobierno gasta 4.8 veces más en un pensionado de la CFE que en uno del Issste. Uno de la comisión, en promedio, recibe 803 mil pesos al año, mientras los beneficiarios del Programa de Pensión a Adultos Mayores obtiene 15 mil.

Desde su punto de vista, se trata de una medida que regresa al país a los tiempos de las pensiones de privilegio.

Esta reforma pensionaria en el sindicato de la CFE obliga al gobierno a adquirir deuda pública, a lo que tanto se ha negado, comprometiendo con ello la viabilidad financiera de la CFE a largo plazo y, aun más, la estabilidad financiera del propio gobierno federal, enfatizó.