Con una producción, el año pasado, de 5 millones de plantas nativas, el Gobierno de la Ciudad de México recuperó el vivero de San Luis Tlaxialtemalco, en Xochimilco, que por varios años fue dejado en el abandono, al grado de que en 2018 tuvo una producción de poco más de 200 mil unidades.

Para este año, informó la Comisión de Recursos Naturales capitalina, se prevé obtener 7 millones de plantas que serán utilizadas en la estrategia de reforestación que la administración local inició el año pasado, aunque la meta es llegar a producir 10 millones de plantas, como pinos, oyameles, cedros, ahuehuetes y árboles frutales, entre otras especies.

El vivero forestal San Luis Tlaxialtemalco es uno de los más grandes de Latinoamérica y el mejor equipado tecnológicamente del país, donde pueden sembrarse hasta 144 plantas por día, señaló el organismo.

Ayer, la jefa del gobierno local, Claudia Sheinbaum, recorrió el vivero, donde destacó que este año también se destinan mil millones de pesos para apoyos a la producción rural de hortalizas, árboles frutales, flores y nopal.

Añadió que en la ciudad el suelo de conservación representa 2 por ciento de la biodiversidad del planeta y 12 por ciento de la del país, por lo que es fundamental preservarlo. De allí la importancia del viviero, pues la reforestación se hace con las propias semillas de especies vegetales silvestres que se conservan en la zona y no son genéticamente modificadas.

Respecto de la clausura del paraje Pelagatos, en el bosque de Milpa Alta, por la siembra de plantas exóticas que no pertenecen al lugar, la secretaria del Medio Ambiente, Marina Robles, admitió que se trata de especies que no son propias de la región y se colocó en un área de mil metros, pero que ya se están retirando.

Agregó que se trata de plantas ornamentales conocidas como suculentas, de las cuales el gobierno está buscando que se dejen de sembrar. Tiene muchísimos años que ha ingresado a la ciudad como parte del gusto de las personas que vivimos en la ciudad; es exitosa y eso hace que pueda llegar a ser invasiva, explicó.