Los cadáveres en bolsas y sábanas volvieron a aparecer en las calles de la capital hondureña, en un repunte de la violencia que afecta al norte de Centroamérica tras una tregua debido al confinamiento para contener los contagios de Covid-19.

En una sola noche, el 13 de agosto, se produjeron ataques sincronizados de las pandillas en diferentes puntos de Tegucigalpa, donde dejaron cinco muertos que las autoridades atribuyeron a la guerra entre las bandas criminales por controlar territorios.

Los maras que asesinan, extorsionan y asaltan han aterrorizado por décadas a la población de las principales ciudades de los países del Triángulo Norte de Centroamérica –Guatemala, El Salvador y Honduras– muchas veces con la complicidad de los policías.

A mediados de marzo comenzó a notarse un declive de las operaciones de los grupos criminales en los tres países, cuando los gobiernos ordenaron el confinamiento de la población para disminuir la expansión de la pandemia, que entonces asomaba en América Central.

Pero tras algunas semanas, la criminalidad volvió a desenfrenarse, especialmente en Guatemala y Honduras, con ataques de las pandillas, mientras persiste el aislamiento con tibias medidas de reapertura en la economía. El cambio se hizo más evidente en Honduras, con la aparición de cuerpos en bolsas y sábanas en las vías públicas, y masacres a tiros de tres o más personas.

A mediados de agosto de 2019, en Honduras se reportaron 2 mil 322 asesinatos, y en el mismo periodo de 2020 van mil 934. Guatemala reportó mil 909 homicidios de enero a julio de este año, mientras en 2019 llegaron a 2 mil 805.

Contrario a estos dos países, El Salvador logró disminuir los homicidios de mil 729 de enero a julio de 2019 a 692 en el mismo periodo de 2020, sin percibir un incremento en el periodo de apertura.

Por otra parte, frente al Palacio Nacional decenas de guatemaltecos protestaron ayer por segunda vez para exigir la renuncia del presidente Alejandro Giammattei por su gestión de la crisis sanitaria y social desatada por la pandemia.

En Perú, el tercer país latinoamericano con más muertos, el director de la aviación policial, el general Alfredo Vildosa, fue detenido por la presunta compra con sobreprecios de suministros sanitarios para prevenir el coronavirus, informó la fiscalía del Callao.

En Chile, los nuevos casos de coronavirus se acercaron a 2 mil, al reportar mil 926 contagios, 600 de ellos asintomáticos, informó el Ministerio de Salud.

Venezuela recibió 73 toneladas de ayuda humanitaria donada por España y Portugal para enfrentar la pandemia, informaron representantes del gobierno venezolano, la Organización de Naciones Unidas y la Unión Europea.

El vicecanciller para Europa, Yván Gil, informó que la carga trae equipos médicos, medicinas, vacunas para diversas patologías, medios para la protección e instrumentos para sanear el agua.

América Latina, que sufre casi una tercera parte del saldo mortal de la pandemia, registró 254 mil 897 decesos y 6.5 millones de contagios.

La región registró 17 mil 95 nuevos fallecimientos en los pasados siete días, una cifra ligeramente más baja respecto de la de la semana pasada.