Viernes 7 de agosto de 2020, p. 24
Washington. Más de 2 mil menores no acompañados han sido expulsados desde marzo, al amparo de una declaración de emergencia que emitió el gobierno de Donald Trump, la cual utiliza la pandemia del coronavirus para justificar la negativa a ofrecer protección a estos menores de acuerdo con las leyes de asilo y sobre tráfico de personas, informó la agencia Ap.
Voceros del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y de la Patrulla Fronteriza se niegan a responder la mayoría de las preguntas sobre el trato que dan a los aproximadamente 70 mil adultos y menores que han sido expulsado según la declaración de emergencia de marzo pasado. No explican cómo deciden si expulsar a un menor o no, ni dónde los retienen antes de deportarlos. Se sabe que han utilizado hoteles donde han alojado a 150 menores no acompañados, entre ellos un bebé de un año.
El Covid-19 ha comprometido aún más los servicios de protección infantil, que ya estaban sobrecargados y con pocos recursos, así que es un desafío brindar a los niños vulnerables el apoyo y la protección que necesitan
, declaró el portavoz del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, Christopher Tidey”.
El 21 de marzo Trump reforzó su postura sobre la migración al implementar una nueva política que tenía como objetivo frenar la propagación del nuevo coronavirus.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos rechaza ahora de forma expedita a la mayoría de las personas que intentan cruzar ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México, o solicitar asilo.
Las nuevas reglas eliminan una práctica de larga data de permitir que los niños soliciten asilo en Estados Unidos.