A 11 años del inicio de la construcción de la torre Mítikah, el pueblo originario de Xoco está devastado, ya que presenta calles de terracería, con parches de cemento, socavones, fugas de agua y de drenaje, debido al mal trabajo de reforzamiento hidráulico y de pavimentación que la inmobiliaria, propiedad de Fibra Uno, debe cumplir como trabajos de mitigación, expusieron los representantes de la Comisión de Participación Comunitaria y la asamblea ciudadana del lugar.

En reunión virtual, que minutos antes de empezar los representantes de Mítikah cancelaron, los pobladores de Xoco tenían previsto exponer, con información más técnica y especializada, cómo han trabajado en las obras que hasta la fecha no tienen supervisión.

El arquitecto Miguel Galicia Muñoz, representante vecinal, reprochó la seriedad de la empresa, que pese a buscar una conciliación con los vecinos decide no participar en el encuentro e informa a las autoridades que ya está conciliando con los vecinos.

El también vecino de Xoco expuso una serie de anomalías que se han dado a lo largo del proceso de construcción, de acuerdo con el estudio de impacto urbano que la constructora presentó en mayo de 2009, donde se establecen condicionantes a la empresa.

El arquitecto indicó que Mítikah está obligada a sustituir mil 166 metros lineales de tuberías de dos y seis pulgadas por una de 12, que hasta el momento desconocen cómo ha trabajado, porque no hay claridad.

Los vecinos indicaron que sólo con recorrer las calles San Felipe, Real de Mayorazgo y Puente de Xoco se puede ver el mal trabajo: parches en el pavimento, agujeros por todos lados debido a las obras inconclusas, desprendimiento del concreto hidráulico, que no lleva un año y ya tiene hoyos que han provocado accidentes, además del cierre de calles, que sin aviso previo trabajadores bloquean el paso generando caos vial y afectando a negocios.

Respecto del drenaje plantearon varias inconsistencias, entre las cuales están las conexiones de las descargas residuales, porque no se han seguido las normas y se ha hecho muy mal, sin que nadie las verifique porque el Sistema de Aguas dice que le toca a la alcaldía y la alcaldía que a Mítikah, pero nadie se hace responsable, expresaron.

Los integrantes de la asamblea ciudadana y la Copaco expusieron que desde hace varios años se realiza un trabajo con opacidad, que aún no se sabe a quién beneficia, si a todo el pueblo o sólo a los nuevos inquilinos.