La jefa de Gobierno de la capital de la República, Claudia Sheinbaum, rindió homenaje este viernes al escritor novohispano José Joaquín Fernández de Lizardi (1776-1827) por su labor en el fomento a la lectura y su posición en favor de los derechos de las mujeres.

Destacó que El Pensador Mexicano fue un independentista, no de armas, pero sí de una pluma que cimbró las conciencias de su época y nutrió la formación de personajes tan fundamentales como Ignacio Ramírez El Nigromante, quien le reconoció como el gran transformador de la nación al afirmar que mientras Miguel Hidalgo rompió las cabezas, aquél las arregló de nuevo.

Y las arregló para modernizar a la patria, para plantear principios impensables a la Colonia, como la educación pública y gratuita, financiada, proponía él, con el impuesto a las carnicerías de la ciudad, subrayó.

En la conmemoración del 200 aniversario de la Sociedad Pública de Lectura, Claudia Sheinbaum recordó que ese establecimiento, fundado por Fernández de Lizardi el 23 de julio de 1820, es considerado la primera biblioteca pública de América Latina.

Aceptó que esa iniciativa, al igual que las ideas liberales del autor de El periquillo sarniento, han servido de inspiración para que el gobierno de la República Mexicana, en coordinación con el de esta ciudad, iniciara en la capital del país una intensa acción en favor del fomento a la lectura.

Refrendamos nuestro respeto y convicción en los valores pedagógicos de la lectura, el compromiso del gobierno de la ciudad por garantizar e impulsar los derechos a la educación y a la lectura de los habitantes de esta metrópoli que vio nacer hace dos siglos el primer establecimiento público de lectura, agregó.

De acuerdo con la jefa de gobierno, otra arista fundamental en Fernández de Lizardi es su convicción por los derechos de las mujeres, como lo expresa, aseguró, en su novela La Quijotita y su prima, publicada en 1818, en la que con gran humor provocó una reflexión que escandalizó a la sociedad colonial, incluso a ciertos independentistas.

Sheinbaum informó que el 23 de agosto se honrará la memoria de Leona Vicario en el Paseo de la Reforma, con la develación de su estatua y la de las mexicanas anónimas forjadoras de la República.

Destacó que el propósito de esa acción es concretar un ejercicio igualitario en una de las avenidas principales de la capital mexicana, y rememoró que el proyecto contempla la colocación de 14 estatuas de mexicanas ilustres entre la Columna de la Independencia y la Puerta de Los Leones.

Con 25 minutos de duración, la ceremonia por el 200 aniversario la Sociedad Pública de Lectura fue presencial y tuvo lugar en la Biblioteca de México, en la Ciudadela, con la participación también de Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente Andrés Manuel López Obrador y presidenta honoraria de la Coordinación de Memoria Histórica y Cultural de México, así como de la poeta Natalia Toledo, subsecretaria de Diversidad Cultural de la Secretaría de Cultura federal, y Alfonso Suárez del Real, titular de Cultura de la Ciudad de México.

La primera habló de la importancia de las sociedades literarias en la historia de México, como la fundada hace 200 años por Fernández de Lizardi, por ser espacios de lectura colectivos en voz alta en épocas en las que el acceso al libro era muy complejo, por su alto costo y los bajos tirajes.

Ponderó, además, el papel central de la lectura para la vida humana, y aseguró que nunca será tarde para agradecer a los libros su existencia. Señaló que, según encuestas, la actual pandemia ha acercado a mucha gente a los libros y exhortó a la sociedad mexicana a seguir practicando la lectura, porque leer no da coronavirus.

Natalia Toledo, en tanto, apuntó que la lectura y los libros son entrañables para los que tienen por nahual al viento y a las nubes, para aquellos que no saben estar fijos en un solo lugar. Para nosotros, la gente nube, la lectura está asociada al canto; cuando alguien lee está cantando y cuando alguien canta lleva en su voz un libro, cuenta el camino de las palabras.