mexicanoen EU y su relación con AMLO y Donald Trump
sólo unos meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, hay diversas opiniones sobre cómo votará el importante electorado hispano. Una opinión controversial surgió entre los críticos mexicanos de la reciente visita de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) a Washington DC. Entre otras cosas, alegaban que la visita del Presidente mexicano le generaría votos hispanos a Donald Trump, el candidato republicano. Sin embargo, hay varias razones por las cuales este argumento no resulta convincente.
Por un lado, no todos los hispanos son de origen mexicano como para que les interese lo que haga López Obrador. Los hispanos en Estados Unidos son una población de más de 60 millones de personas de diferentes orígenes étnicos, culturas, nacionalidades, lugares de nacimiento y situaciones socioeconómicas y migratorias. Casi 39 millones son de origen mexicano, nacidos en México o tierras estadunidenses. Pero más de 20 millones no lo son.
Los hispanos tampoco son un bloque con los mismos intereses y preferencias políticas. Por ejemplo, para los cubanos y puertorriqueños la política migratoria de Estados Unidos y el T-MEC (tratado comercial México-Estados Unidos-Canadá) no son una prioridad o un asunto relevante, como podrían ser para los de origen mexicano.
Por otro lado, tampoco hay argumentos convincentes para alegar que la visita de AMLO pudiera influir en las preferencias políticas de la población de origen mexicano y generarle más votos a Trump. Hay por lo menos cinco razones para dudarlo.
Primero, probablemente la mayoría de la población de origen mexicano en Estados Unidos ni se enteró de la reunión del Presidente de México con Donald Trump. No sé de alguna encuesta formal que lo confirme, pero un sondeo que hice sugiere que así es; entre otras razones, porque los medios estadunidenses le dieron muy poca cobertura a la visita.
Segundo, sería difícil que la visita de AMLO pudiera influir significativamente en una población tan diversa como la de origen mexicano en territorio estadunidense. Hay obreros, cocineros, jornaleros agrícolas, empresarios, profesionistas y líderes políticos. Hay ricos, pobres y clasemedieros. Algunos no saben leer ni escribir, ni en español ni en inglés, y otros cuentan con educación superior.
Tampoco todos tienen lazos familiares, económicos o políticos fuertes con México. Hay estudios que indican que los lazos generalmente persisten en-tre los nacidos en México, pero se disipan en las siguientes generaciones.
La mayoría nació en Estados Unidos y unos 11 millones nacieron en México. Algunos son ciudadanos de Estados Unidos, otros más son residentes autorizados y unos 5 millones viven y trabajan en el país gobernado por Trump sin permiso.
Tercero, muchos migrantes mexicanos en Estados Unidos apoyan a AMLO, pero no todos. Esto se puede ver en los resultados de las elecciones presidenciales en México en 2018. De los 98 mil que votaron en tierras estaunidenses, unos 64 mil votaron por AMLO. En suma, no todos los mexicanos o de origen mexicano que viven allá tienen los mismos intereses y preferencias electorales y de políticas públicas, ni son potencialmente susceptibles a la influencia de AMLO o de algún otro presidente mexicano.
Cuarto, más relevante aún es que hay estudios que indican que los electores de origen mexicano en Estados Unidos deciden su voto principalmente con base en sus intereses domésticos. Algunas veces sus intereses coinciden con los del Presidente de México, pero no siempre. De hecho, la mayoría repudia a Trump por su retórica y políticas migratorias hostiles. Además, es partidaria del Partido Demócrata, con Joe Biden como contrincante del republicano Trump, en las elecciones del 3 de noviembre.
Por eso, es improbable que una reunión entre López Obrador y Donald Trump, por muy cordial que haya sido, los haga cambiar de opinión; es decir, que los haga ver a Trump como una buena opción electoral y no como el presidente que lleva casi cinco años agrediéndolos y perjudicándoles la vida.
Quinto, Trump podrá explotar las imágenes y discursos de la visita de AMLO para promocionarse todo lo que quiera. Pero eso no necesariamente le generará más votos. De hecho, su halagadora retórica hacia los mexicanos
durante la visita podría restarle votos a Trump entre su base dura.
En suma, el voto de los electores de origen mexicano en los comicios presidenciales de noviembre próximo en territorio estadunidense lo determinarán ellos y no el Presidente de México. Votarán por el candidato que los convenza de que buscará cambios concretos para mejorar la política migratoria y de educación, empleo y salud para ellos en Estados Unidos.
* Académica especialista en relaciones México-EU en materia de política migratoria y la población de origen mexicano en EU.