Puebla, Pue., El director en Puebla del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Manuel Villarruel, señaló que la suspensión de trabajos en la zona arqueológica de Tehuacán se debe a las condiciones causadas por el Covid-19 y al semáforo sanitario que, en el caso de este estado, se ha mantenido en rojo en las semanas recientes. Contrario a lo expresado por el encargado de la zona, Mauricio Gálvez, quien señaló que la causa de la suspensión temporal se debía al corte presupuestal del INAH, el titular del Centro INAH Puebla refirió que en las excavaciones que comenzaron años atrás, ha habido diferentes etapas de trabajo.

“El año pasado todavía se hicieron algunos trabajos y el proyecto de investigación sigue. En primer lugar, por la pandemia, se han tenido que suspender temporalmente o más bien se aplazó el proceso de excavación en este momento.

Por el semáforo en el que se encuentra Puebla, y por la política general que el gobierno de la República y la Secretaría de Cultura han determinado, las zonas arqueológicas y museos del INAH están cerrados, lo que restringe el proceso de trabajos al interior de la zonas, expuso.

Villaruel agregó que hay una reprogramación de las actividades, las cuales se retomarán a inicios de 2021.

Mencionó que el sitio de Tehuacán es uno de los más importantes de Puebla, pues presentó un asentamiento mesoamericano importante que tuvo un auge entre el clásico y el posclásico.

Es importante, continuó, por su ubicación geográfica, por ser un centro urbano con decisiones administrativas importantes, y por sus componentes religiosos y de control militar del territorio.

Comparó que como el templo que se ubica en el corazón de la Ciudad de México y el otro recién descubierto en construcciones virreinales también en esa urbe, el de Tehuacán también es relevante, pues tiene una vinculación con estos espacios ceremoniales.

De alguna forma marca los vestigios de vinculación comercial y cultural entre las diferentes ciudades, en la arquitectura mesoamericana y asentamientos humanos.

Dicho templo, afirmó Villarruel, consolida a Puebla como centro de desarrollo prehispánico y permite establecer los vínculos entre las culturas del Occidente, Altiplano y las del Golfo de México.