De enero a mayo el saldo de la cartera de crédito que los bancos otorgan para la adquisición de vivienda ascendió a 940 mil 27 millones de pesos, monto 9.94 por ciento superior a lo reportado en el mismo lapso del año previo, revelan las cifras más recientes de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

En meses recientes este segmento es de los pocos que han presentado crecimiento, pese a la crisis que ha ocasionado la pandemia de Covid-19. Y debido a los buenos resultados, las instituciones financieras han optado por iniciar una nueva disputa por reducir sus tasas de interés en productos hipotecarios.

De acuerdo con datos del organismo regulador, del total de la cartera el segmento de vivienda media y residencial hasta el quinto mes del año alcanzó 814 mil millones de pesos, lo cual representó un incremento de 8 por ciento en comparación con el mismo lapso del año previo.

No obstante, el portafolio destinado a vivienda de interés social en mayo tuvo una caída de 15.7 por ciento respecto de los resultados del año previo, con una cartera de sólo 7 mil millones de pesos.

Cabe mencionar que el crédito destinado a vivienda por los bancos es el que tiene los índices de morosidad más controlados en el sistema, pese a la contingencia sanitaria.

Según las cifras, el Índice de Morosidad (Imor) en la cartera total de financiamientos de ese tipo es de 3.17 por ciento. Por portafolio, en el de vivienda media y residencial es de 2.79 y en el de interés social de 7.36.

A su vez, el Imor Ajustado, que suma la cartera total, la vencida y las quitas y castigos en los últimos 12 meses, es de sólo 3.82 por ciento. En el último año únicamente se incrementó 0.37 puntos porcentuales.

Con estos números, ante la baja en la tasa de interés del Banco de México, que actualmente se ubica en 5 por ciento, algunos bancos han optado por reducir las suyas a niveles históricos.

Santander dio a conocer el martes de la semana pasada que con el contrato Hipoteca Plus se puede tener acceso a un producto con una tasa de interés fija de 7.75 por ciento, la más baja en la historia del mercado. Un día después BBVA México anunció que puso la suya en un rango de 7.90 a 10.40 por ciento, también fija.