Lunes 29 de junio de 2020, p. 9
A más de un año de que fue aprobada la reforma laboral, y a unos días de la entrada en vigor del nuevo Tratado Comercial México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) con sus implicaciones en esta materia, los efectos de la reforma en la vida interna de los sindicatos siguen siendo opacos, de acuerdo con especialistas.
Si bien muchos de los sindicatos no tienen programados procesos de renovación en el presente año, la reforma no ha derivado en alguna renovación en los gremios más numerosos ni en las centrales obreras que, a decir de sus afiliados, haya sido exitosa y transparente.
Alberto Romero García, coordinador de vinculación con el medio sindical y cursos en línea de la Universidad Obrera de México, indicó que el cambio debe venir de los trabajadores, pero aún no se ha materializado debido a la poca difusión de los derechos laborales.
Mientras algunos sindicatos han caído en la simulación
, la reforma también abrió la puerta para que los agremiados ejerzan su libertad con procesos democráticos y que a la larga los que iban a tener que aceptarla serían los dirigentes. Desafortunadamente, este año hemos visto que muy pocas organizaciones sindicales por voluntad propia lo han hecho, y los agremiados tampoco han ejercido ese derecho
.
Héctor de la Cueva, coordinador del Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (CILAS), sostuvo que los procesos de revisión contractual tampoco se han realizado de mano de los trabajadores, sino que han sido consecuencia de negociaciones sólo por parte de sus dirigentes.
La reforma laboral no está avanzando, realmente no está habiendo legitimación de contratos; los trabajadores no están siendo llamados a consulta o votación para ver si reconocen esos contratos que negociaron en nombre de ellos; no se está cumpliendo del todo con las reformas estatutarias y todavía no hay elecciones democráticas, ni en los grandes sindicatos ni en los pequeños en las industrias
, agregó De la Cueva.
La reforma laboral aprobada en 2019 invita de manera laxa
a modificar los estatutos sindicales, por lo que se realizan cambios de forma y no de fondo, agregó Romero García, quien consideró que con ello se deje entrever que se puede jugar con la ley
.
No obstante, hay sindicatos como el de los trabajadores de Tornel que lograron cambios en sus tomas de decisiones
, así como las trabajadoras del hogar, que conformaron una agrupación con una estructura adecuada. En contraparte, sostuvo que muchas centrales obreras se han rezagado no sólo en una real renovación interna, sino también en la capacitación para sus agremiados ante los cambios tecnológicos en el mundo laboral.