Retirar los apoyos a la producción cinematográfica dejaría al cine mexicano completamente a merced de la cultura trasnacional y pondría en peligro a películas de aliento más alternativo y contestatario, fuerte, que da voz a los que no la tienen, alertó el director Guillermo del Toro.

El cine que habla de otras realidades quedaría invisible si no se da la palabra a nuevos cineastas; desaparecer el Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine) sería quitarle no sólo la palabra y la memoria a México, sino segar una expresión que no tiene paralelo, planteó durante un foro convocado por la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados para analizar la iniciativa de Morena de eliminar ese mecanismo.

Del Toro llamó a proteger el cine mexicano, un arte que sí ha demostrado con creces dar resultados, regresar económica, cultural y artísticamente los apoyos que recibe y porque representa un rencuentro con las voces de nuestra gente, de nuestra realidad; no podemos permitir en abstracto la remoción del Fidecine, porque nos quedaríamos en el vacío, sujetos al cine trasnacional que no tiene problemas de producción y exhibición, y sin este apoyo es impensable que se sostenga la producción nacional.

Incluso, consideró que el apoyo al cine constituye una cuestión de salud e identidad para el país, de una industria que se ha esforzado y llevado una lucha constante para ganar espacios, y lo que ha sucedido ha sido milagroso. Pidió a los legisladores ver los números, que apoyan lo que hacemos y muestran que damos resultados.

Durante la reunión virtual, la productora Inna Payán presentó cifras de la aportación económica y laboral del cine mexicano, además de su fuerza cultural y movilizadora de identidad. Somos una industria aparatosa pero frágil, agregó.

Citó que en 2018 el cine mexicano generó 30 mil 946 empleos, 37 por ciento más que en 2010, lo que representa una cifra similar a los generados por la industria básica del hierro y el acero. Se estima, dijo, que 40.6 por ciento de estos empleos corresponden a mujeres.

Además, expuso, genera miles de empleos indirectos y una gran derrama económica en otras áreas, por lo que representa una de las industrias con mayor efecto multiplicador del país, con un comportamiento cuatro veces más dinámico que el conjunto de la economía mexicana y que en 2018 aportó 0.09 por ciento del PIB”.

El actor y productor Gael García Bernal acotó que defender al Fidecine no implica que estemos buscando más dinero, sino que el gobierno haga más y apoye al cine. Planteó buscar nuevas formas de financiamiento a nuevos creadores para que la industria sea autosuficiente.