Con dos reformas institucionales, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) inició ayer el proceso de transformación para poder regresar a las actividades ante la la pandemia de Covid-19.

El rector Enrique Graue emitió los acuerdos por los que se crean la Coordinación de Universidad Abierta, Innovación Educativa y Educación a Distancia (Cuaieed), y la Dirección General de Bibliotecas y Servicios Digitales de Información (Dgbsdi), para potenciar en los próximos meses la educación mixta y a distancia y disminuir así el aforo de la comunidad universitaria a las escuelas y facultades.

La universidad también decidió que para prevenir contagios, a partir de ayer y hasta el 31 de octubre de 2020 se suspende la asistencia de los universitarios a todo tipo de actividad académica o cultural en instituciones del extranjero.

El miércoles, el rector Graue había dicho a la comunidad universitaria que cuando la UNAM regrese a sus actividades presenciales tras la contingencia por Covid-19, no podrá hacerlo con el aforo y las características con las que operaba antes de la pandemia.

Tendremos un regreso distinto y hemos de prepararnos para ello, afirmó.

Esa preparación está en marcha. Según los acuerdos publicados, la Cuaieed impulsará la creación y aplicación de modelos educativos y metodologías innovadoras en las modalidades de educación presencial, abierta, a distancia y mixtas o semipresenciales.

También vinculará al sistema presencial con el de Universidad Abierta y Educación a Distancia en las diferentes entidades académicas, mediante proyectos que fomenten la intermodalidad; y se encargará de planear, desarrollar e implementar estrategias de transición para enfrentar situaciones de emergencia educativa, como consecuencia de pandemias o eventos similares.

La creación de la direccción general de bibliotecas, según el acuerdo, se da en el contexto de un mundo cada vez más digitalizado. Además, en las condiciones precipitadas por la contingencia sanitaria mundial, las bibliotecas universitarias están llamadas a redefinir, expandir y acrecentar sus alcances en términos de acceso a sus acervos y recursos a distancia, se señala en el documento.

En tanto, la decisión de cancelar toda movilidad académica de la comunidad universitaria implica que ningún integrante de la UNAM participará por cinco meses en cursos, conferencias, congresos, seminarios, mesas redondas y talleres, entre otros, en instituciones del extranjero.

También quedaron suspendidas las visitas de intercambio académico internacional y la recepción de visitantes académicos para la realización de estancias académicas o de investigación, y no se autorizará ningún apoyo económico institucional para movilidad internacional ni para recibir visitantes del exterior del país.