Martes 9 de junio de 2020, p. 22
Cancún, QR., Agrupaciones ciudadanas se sumaron a la defensa de las seis personas que el pasado viernes fueron agredidas y retenidas varias horas por policías cuando realizaban una protesta pacífica para impedir que el parque principal de Puerto Morelos, mejor conocido como El Casco Antiguo, fuera derrumbado, como parte de un proyecto de remodelación.
Reiteraron que recabarán firmas para presentar al Congreso local una solicitud de juicio político contra la presidenta municipal, Laura Fernández Piña, del Partido Verde Ecologista de México, y para pedir a las secretarías federales de Gobernación y de Seguridad y Protección Ciudadana la destitución de Gumersindo Jiménez Cuervo, secretario de seguridad pública local.
Los activistas, quienes se manifestaron ese día contra la falta de transparencia del proyecto y la ausencia de consulta ciudadana, convocaron a una movilización para este miércoles a las 15 horas de la carretera federal hasta el parque de El Casco Antiguo.
Al mediodía de este lunes, integrantes del colectivo Puerto Morelos Sustentable, acompañados por miembros de Somos Tus Ojos Quintana Roo y ciudadanos, acudieron a la segunda visitaduría de la Comisión de Derechos Humanos de Quintana Roo, donde un médico valoraría los golpes que los manifestantes sufrieron cuando fueron reprendidos por elementos de la policía de Quintana Roo para sacarlos del parque, donde minutos después fue derribado el quiosco.
Frente a la oficina de dicho organismo, en Cancún, Moisés Araujo, integrante de la asociación civil Somos Tus Ojos, anticipó que demandarán penalmente a Fernández Piña para que se haga una investigación a fondo sobre su participación en los hechos violentos.
Señalaron que la destitución de tres mujeres policías no es suficiente, pues además de ellas hubo oficiales varones que también los agredieron y todos recibieron órdenes para actuar
.
Daniela Zambrano, una de las chicas agredidas, denunció que los uniformados replegaron a los manifestantes a la banqueta y de ahí la llevaron casi a rastras a una patrulla.
En el trayecto a los separos, aseguró, un agente estuvo literalmente sobre ella, sometiéndola con pies y rodillas. Me dijeron que ya estaban preparando todo para pasarme a la fiscalía, que pasaría de seis meses a 10 años en la cárcel, hasta que el juez civil me ayudó, y sólo me amonestó para después dejarme en libertad
, narró.