Entre el miedo a contagiarse de Covid-19 y la necesidad de volver a laborar, miles de trabajadores de la industria automotriz y de la construcción regresaron este lunes a sus fábricas y obras.

En tanto, dirigentes gremiales en el sector turístico llamaron a la prudencia en la reapertura de esta actividad, a fin de no poner en riesgo a quienes laboran en ese sector.

Organizaciones gremiales de la rama automotriz y de la construcción –que junto con la minería regresaron ayer de manera masiva a sus actividades– expusieron que si bien la mayoría de las empresas han cumplido con las medidas de seguridad para evitar la propagación del virus, no se puede garantizar plenamente que no se infecten. El principal pendiente, coincidieron, es la seguridad de los empleados del trayecto de su casa a los centros de trabajo y viceversa.

En el tema de la construcción, señalaron que este sector se reactiva de una manera más lenta, debido a que las compañías siguen revisando si cuentan con los recursos y materiales para retomar labores. Juan Carlos Velasco Bueno, líder del Sindicato Nacional de Autotransporte y Construcción de la CTM, señaló que ello se debe a que desde antes de la pandemia la industria estaba contraída y ahora se suman las pérdidas generadas durante el confinamiento.

Sobre el sector automotriz, Reyes Soberanis, secretario general de la Confederación Obrera Revolucionaria, expuso que desde hace 15 días algunos empleados regresaron a las empresas para revisar las instalaciones. Fueron grupos de 50 personas por turno para preparar la maquinaria, la materia prima y todo lo que se requiere para arrancar la producción, dijo.

Indicó que ayer regresó la mayor parte de los aproximadamente 5 mil trabajadores que laboran en las 12 compañías con las que sindicatos de la COR tienen contratos colectivos, y recordó que las personas que tienen enfermedades crónicas y adultos mayores siguen estando en sus casas al ser consideradas población en riesgo.

Julia Quiñones, del Comité Fronterizo de Obreras, indicó que ayer reanudó la totalidad de las compañías de la región de Piedras Negras y Acuña, Coahuila, con cerca de 65 mil trabajadores. Señaló que en el norte del país las fábricas han atendido las medidas sanitarias, pero los trabajadores están angustiados, tienen miedo pero por otro lado ya no aguantan tanto tiempo de estar sin recibir su sueldo y otros con salarios de menos de 50 por ciento.

Isaías González, dirigente de la CROC, organización que tiene 600 mil afiliados en distintas áreas del sector turístico, alertó que adelantarse podría ser contraproducente, y convocó a que primero se hagan protocolos para un control que evite que personas contagiadas de Covid-19 puedan expandir el virus en centros turísticos. Además, dijo, se debe establecer acuerdos con otros países para evitar que viajen a México quienes presenten síntomas.

Realizó estas declaraciones, luego de que el secretario de Turismo, Miguel Torruco, y el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, señalaron que la zona de Cancún comenzará a partir de la próxima semana una reactivación gradual.