Martes 2 de junio de 2020, p. 8
El pianista, arreglista y compositor José Luis Martínez Contreras (Ciudad Mendoza, Veracruz) –Güicho o Luisito en el ambiente de la música tropical– cumple 80 años y 66 de carrera musical, si se toma en cuenta que antes de cumplir 14 se fue de su casa, trompeta bajo el brazo, en busca de cómo subsistir. Luego cambió la trompeta por el piano.
En más de seis décadas formó parte de agrupaciones como el Conjunto Anacaona, de Federico Sánchez, y la Sonora Veracruz, de Pepe Vallejo, en varias etapas.
Fundó La Justicia con el bajista Alejandro Barrientos, así como el grupo Luisito y Manolo, con el trompetista Manolo Güido; además, muchos años fue pianista de Luis Ángel Silva Melón, con quien grabó dos discos en 1974 con su grupo El Gran Pasto.
También fue arreglista y pianista de Manolo Muñoz; colaboró con Virginia López, Alberto Vázquez, las Hermanas Castilla, Linda Vera y Verónika con K. Fue director artístico de Discos Gas y grabó dos elepés con Carlos Lico.
Con Melón impartió talleres de son cubano en el Centro Nacional de las Artes, antes de trasladarse a Jalapa, donde durante 12 años estuvo al frente de la Orquesta de Salsa de la Universidad Veracruzana.
Es autor de números como Rico tumbao y Tumbao y jalao. Sin embargo, cuando se le pregunta por algún éxito, menciona los dos discos que grabó con el cantante español Salvador Escudero, dentro del género de la rumba flamenca. Luisito mantiene el ánimo de seguir trabajando en la música del son cubano.
Tiene particular interés en mostrar a los alumnos cómo funciona la clave y cómo hacer arreglos musicales con base en ella. Por ejemplo, cómo no dejar que se monte una frase a clave, es decir, si la siguiente frase está al revés a la rítmica hay que aumentarle o disminuirle un compás
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–¿Qué opina de lo que se dice de que la clave ya no se usa?
–La clave ni está fuera de moda ni nada. Quienes digan eso no han sabido o no han querido educar sus ideas con base en ella. Tal vez no pueden, porque no la sientan o no están bien informados porque los soneros de antes decían que el tema musical que está fuera de clave no sirve.
Cualquier músico que se considera sonero de verdad tiene que saber manejar la clave. No hay de otra, porque así son las reglas.