La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, al participar ayer en el Diálogo virtual por un México sin fobias: políticas contra la discriminación por orientación sexual, presentó ocho acciones para eliminar la discriminación contra la diversidad sexual.

Este gobierno, destacó la titular de la política interior del país, reconoce su deber constitucional de eliminar la homofobia, la lesbofobia, transfobia y la bifobia. Éste, insistió, es un compromiso ineludible.

Comentó que el primer derecho humano, el más importante de todos, es a la identidad. Quién soy, de dónde vengo, quiénes son mis padres, qué nacionalidad tengo, pero también qué sexo tengo, qué orientación sexual tengo.

La funcionaria compartió ocho líneas de acción contra la discriminación por la orientación sexual. Primero, resaltó, nos comprometemos a incluir en la transformación de México un importante componente de modificaciones culturales. Sabemos que la persistencia de los prejuicios proviene del desconocimiento y la falta de información. Esto es lo que da pie a que sigan las prácticas excluyentes.

Indicó que buscaremos profundizar el conocimiento sobre la discriminación, e impulsar contenidos y campañas contra los estigmas hacia cualquier orientación sexual, identidad o expresión de género.

Segundo, apuntó, seguiremos el combate también a los prejuicios dentro del sector público, para que la atención a las personas se realice sin discriminación; tercero, des-de el gobierno impulsaremos que en aquellos estados donde aún no es realidad, todas las personas tengan derecho a contraer matrimonio sin discriminación.

Asimismo, se impulsará que cualquier persona pueda conseguir, por la vía administrativa, los documentos oficiales que reflejen su identidad de género.

Apuntó que “seguiremos sosteniendo que cualquier esfuerzo para ‘corregir’ la orientación sexual o identidad de las personas es violatorio de los derechos humanos”, y se va a acompañar la transformación de las escuelas. Un gran logro de esta administración ha sido incluir la obligación de crear un ámbito educativo inclusivo en la nueva Ley General de Educación.

Sostuvo que se continuará con el impulso de políticas públicas incluyentes, y, finalizó, se reconoce que en el extremo de la discriminación se encuentran los crímenes por prejuicios .