16 de mayo de 2020
• Número 152
• Suplemento Informativo de La Jornada
• Directora General: Carmen Lira Saade
• Director Fundador: Carlos Payán Velver
|
Viticultura y Covid-19
Ofelia Becerril Quintana El Colegio de Michoacán
El COVID-19 ha cambiado el trabajo y la vida de los migrantes mexicanos, hombres y mujeres, que laboran año con año en Canadá, por medio del Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales (PTAT). El 9 de abril 2020, el Consulado de México en Vancouver informó que 19 de 65 trabajadores empleados en una granja de Columbia Británica dieron positivo a COVID-19 (EFE, 2020).
Después de 45 años del PTAT los trabajadores agrícolas son imprescindibles pero no cuentan con condiciones adecuadas de trabajo y salud. Para el gobierno canadiense los trabajadores mexicanos son imprescindibles y su contratación permite fortalecer la seguridad alimentaria de Canadá. México se comprometió con la reactivación del PTAT. La investigación realizada en ambos países muestra que en 45 años de funcionamiento del Programa es evidente la contribución económica de los trabajadores mexicanos a la agroindustria alimentaria canadiense, de ahí el crecimiento del Programa. El número de trabajadores mexicanos del PTAT se ha incrementado de 203 en 1974 a 25,637 en 2019, y de 37 trabajadoras en 1989 a 770 en 2019 (STPS, 2019, Gráfica 1).
Hoy en día prevalecen precarias condiciones de trabajo y ningún trabajador goza de estatus legal pleno. El contrato de empleo establece que el trabajador debe laborar entre seis semanas y ocho meses, ser provisto de un alojamiento limpio, seguro y adecuado y recibir el salario mínimo agrícola. En la práctica hay incumplimiento en el pago de compensación a trabajadores por enfermedad o accidentes de trabajo y en el seguro médico ocupacional y no ocupacional, y cuando los migrantes llegan a Canadá algunos empleadores les quitan la tarjeta de salud.
A pesar del contexto de la pandemia, los trabajadores del PTAT no han dejado de laborar y constituyen una población altamente vulnerable por cinco fuentes de riesgo a su salud: 1) la alta movilidad de migrantes y las condiciones en que viajan desde múltiples localidades de México a diversos sitios de nueve provincias canadienses constituyen una fuente de vulnerabilidad y de expansión del contagio debido a que se trasladan en camión, avión y camioneta. Entre abril y mayo viajarán en vuelos privados 9 mil trabajadores (Martínez, 2020), justo cuando la pandemia alcanzará su mayor pico; 2) los trabajadores laboran en espacios abarrotados trabajando uno muy cerca del otro; 3) las condiciones de vivienda caracterizadas por el hacinamiento, pues muchas empresas albergan a los trabajadores en cuartos muy pequeños o en trailers descompuestos. Comparten la vivienda entre 15 y 20 trabajadores por casa. También hay habitaciones tipo galeras cuyo interior está acondicionado con literas colocadas en fila, por lo que el hacinamiento es mayor (fotos 1 y 2). Lo que significa que no pueden mantener una distancia de 1 a 3 metros, medida importante para evitar el Covid-19; 4) los trabajadores no son provistos con traductores o capacitación de inglés o francés y la barrera del idioma es una limitante para que puedan acceder al sistema de salud; 5) rebrotes de Covid-19 en caso de regresar enfermos con sus familias y comunidades de origen por el riesgo de propagación del virus en la población rural mexicana.
Referencias
EFE, “Un grupo de 19 trabajadores mexicanos en Canadá son positivos a COVID-19”, 9 de abril de 2020. Disponible en www.telemundochicago.com/noticias/mexico/un-grupo-de-19-trabajadores-mexicanos-en-canada-son-positivos-a-covid-19/2080886/.
Martínez, María del Pilar, “Trabajos agrícolas temporales en Canadá continúan pese a contingencia por Covid-19”, El Economista, 19 de abril de 2020. Disponible en www.eleconomista.com.mx/empresas/Trabajos-agricolas-temporales-en-Canada-continuan-pese-a-contingencia-por-Covid-19-20200419-0015.html.
STPA. Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales Mexicanos a Canadá. Datos sobre Mecanismo de Movilidad Laboral a Canadá (1974-2019).
Es urgente implementar acciones binacionales, entre distintos actores, como parte del reforzamiento del PTAT para garantizar el acceso a los servicios de salud de los trabajadores. Una primera tarea es el reforzamiento de la protección consular mexicana en la supervisión de las condiciones de trabajo y vivienda para evitar el hacinamiento y garantizar los derechos de salud, laborales y la seguridad de los migrantes. Es necesaria la coordinación entre instituciones que administran el PTAT con organizaciones y centros de apoyo a migrantes para generalizar brigadas de información y salud. El impacto del COVID-19 en el trabajo y la salud de migrantes mexicanos en Canadá debe de estar en la agenda política binacional de ambos países. •
Opiniones, comentarios y dudas a [email protected] |