El presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Juan Pablo Graf, anticipó a la Cámara de Diputados que a pesar del incremento de 24.9 por ciento en la cartera vencida de las empresas y de 31.1 en créditos de vivienda, así como el aumento de 6.2 por ciento en el índice de morosidad –el máximo de los dos últimos años– no vislumbramos algún rescate bancario.

Este miércoles, en una reunión virtual con diputados de la Comisión de Hacienda, Graf dijo que el instrumento conocido como prueba de estrés prevé que la banca está preparada para un escenario crítico como el de este año.

Además, refirió que la CNBV ha tomado medidas, como permitir a los bancos aplicar los criterios contables especiales, para registrar restructura de préstamos como cartera vigente y pedirles no tomar dividendos.

Expuso que aun cuando –a marzo– ya se sienten los efectos de la pandemia por coronavirus en el sector bancario, los intermediarios financieros tienen fortaleza frente al escenario de riesgo que vamos a empezar a ver.

Durante el encuentro, destacó que ya se notan los efectos de las medidas de aislamiento sobre el desempeño de la cartera vencida, que se traduce en un incremento importante, lo cual ya impacta la economía y la actividad crediticia.

Explicó que el aumento significativo de la cartera vigente de las empresas se explica en parte porque la liquidez se vuelve muy importante en la coyuntura por la pandemia, y para mantener solvencia éstas han tenido que ejercer líneas de crédito ya contratadas.

Ejemplificó que dicha cartera crece a tasa mensual real de 13 por ciento, no sólo por el ejercicio de las líneas de préstamo, sino porque en parte están en dólares, y debido al tipo de cambio han registrado un incremento importante.

En contraste, el crédito a las pequeñas y medianas empresas ha registrado una contracción de 7.8 por ciento.

Graf destacó que las medidas adoptadas ante el impacto de la pandemia en el sector financiero van en la dirección de lograr un balance delicado entre que los bancos no corten crédito, consuman su capital y liquidez, y continúen con el apoyo a los deudores.

Ante las dudas de diputados de Morena y PT respecto a que algunos bancos puedan utilizar los criterios contables especiales para trucar sus números, señaló que se vigilarán con detenimiento y en detalle los reportes sobre la evolución del registro de cartera. Pedimos a los bancos que los publiquen y sean muy transparentes.

Recordó que a partir de las crisis de 2008 y 2009, uno de los acuerdos internacionales más importantes entre reguladores y supervisores fue aplicar las llamadas pruebas de estrés para prever riesgos, y los resultados para 2020 dicen que la banca está preparada para escenarios como los que vamos a tomar.

Cuando el diputado Carol Antonio Altamirano (Morena) le preguntó si, ante el riesgo de mayor morosidad, se vislumbra algún rescate mediante intercambio de cartera mala por bonos respaldados por el gobierno, confirmó que no.