Madrid. En Estados Unidos empezarán los conciertos con normas de distanciamiento social los próximos días en los estados que han decidido eliminar restricciones, en busca de la nueva normalidad en el contexto del coronavirus.

Así, la sala TempleLive en Fort Smith (Arkansas) anunció que el líder de Bishop Gunn, Travis McCready, actuará allí el próximo 15 de mayo, en el que será probablemente el primer concierto en vivo desde que se prohibieran las reuniones masivas en ese país.

El local tiene un aforo máximo de mil 100 asistentes, reducido para la ocasión a 229 butacas separadas, estuches para fans, filas de dos a 12 entradas vendidas en grupos con al menos dos metros de distancia.

La intención es aislar en pequeños grupos a la audiencia, que a su vez tiene que mantenerse separada entre sí. A todos se les tomará la temperatura al entrar a la sala y deberán llevar mascarillas, que se venderán en el propio concierto. A cada baño sólo se podrá pasar en grupos de 10 personas como máximo, informa Pitchfork.

El recital hace evidente la directiva del gobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, quien limitó recientemente los aforos para actividades cerradas a un máximo de 50 personas hasta el próximo 18 de mayo.

En Arkansas se sigue así la senda abierta semanas atrás por una pequeña sala de Suecia, que desde entonces realiza conciertos con distanciamiento.