El director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, anunció ayer que además del Centro Cultural Los Pinos, varios hoteles brindan alojamiento temporal a médicos y personal de enfermería que atienden a personas que padecen Covid-19.

Dio a conocer que desde hace dos semanas se usa plasma para tratar a pacientes graves y resaltó que hay abasto de Remdesivir e Hidroxicloroquina en caso de que México inicie una ronda de ensayos clínicos.

Luego de que la semana pasada el gobierno federal anunció que en los hospitales del IMSS se atendería a personas no derechohabientes afectadas por Covid-19, ayer el instituto informó del acuerdo firmado con el sindicato, mediante el cual se ponen a salvo los derechos de los trabajadores para evitar sobrecargas de trabajo y la prolongación de jornadas. También se garantiza que tendrán la protección necesaria para evitar el riesgo de contagio.

Por la mañana, Robledo aseguró en Palacio Nacional que el sondeo aplicado entre personal de salud sobre un alojamiento alterno arrojó que 85 por ciento lo requiere por la lejanía entre su hogar y su centro de trabajo, por tener algún familiar entre los grupos vulnerables o por temor a las agresiones que han ocurrido en traslados o al realizar otras actividades.

Por eso, añadió, el apoyo no es sólo en la Ciudad de México, sino en muchos lugares donde lo han solicitado. En la capital del país se dispuso un hotel del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social, y en el sur de la ciudad otro para personal del IMSS Bienestar. En el caso del Centro Cultural Los Pinos, dijo que se instalaron 58 personas de las cien que albergará.

El presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que muchos hoteleros pusieron sus instalaciones al servicio de la causa, básicamente en la Ciudad (de México), y agradeció su solidaridad.

En cuanto a la atención de personas no derechohabientes, indicó que la medida tiene como propósito hacer frente al incremento acelerado de casos de Covid-19 y la inminente saturación de los hospitales de la Secretaría de Salud y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) en el valle de México.

Médicos y directivos consultados por este diario explicaron que la movilidad de pacientes internados es alta. Depende de la condición de cada persona. Algunas pueden estar 15 días en terapia intensiva y superar la infección y otros duran unas cuantas horas y mueren por complicaciones graves. Ayer la ocupación de camas de hospitalización general en Ciudad de México rebasó 70 por ciento y de las que están equipadas con ventiladores para pacientes críticos más de 60 por ciento.