Pandemia y economía // Borolas se pone gallito
nivel mundial los efectos del Covid-19 y el intento por atemperar su funesto impacto ha concentrado la atención, capacidad y acción de los gobiernos en el entendido de que el costo económico sería contundente, sin olvidar que la tendencia recesiva comenzó a mediados de 2018. La estadística que arroja la pandemia es brutal y, como advierten las autoridades sanitarias, parece que la humanidad deberá acostumbrarse
a convivir con esa amenaza, mientras se encuentra la fórmula para, en la medida de lo posible, erradicarla del escenario global.
Hasta ahora, en la contabilidad mundial, se reportan más de 3 y medio millones de casos confirmados y cerca de 250 mil muertes, y en ambos casos las cifras crecen cotidianamente y de forma espectacular. La protección de la vida se mantiene como prioridad en la mayoría de las naciones, aunque algunos gobernantes (como Trump y Bolsonaro) insisten en que lo verdaderamente importante es la reactivación económica.
En el caso mexicano las autoridades consideran que lo que suceda en el presente mes será definitivo para el control de la pandemia, lo que implicaría –de lograrse los resultados esperados– el progresivo relajamiento de las medidas sanitarias y la paulatina reapertura y reactivación de la economía.
Cierto es que primero debe ser la salud y la vida de los mexicanos, pero es de suponer que, superada la emergencia sanitaria, el gobierno de López Obrador tiene un plan económico bien estructurado para impulsar a todos los sectores productivos.
En vía de mientras, el Instituto para el Desarrollo y el Crecimiento Económico –de cuyo análisis se toman los siguientes pasajes– advierte que México llegó en medio de una recesión económica a enfrentar el problema de la pandemia de salud pública desatada por el Covid-19. Las estadísticas del PIB oportuno presentadas por el Inegi para el primer trimestre de 2020 permiten confirmar lo anterior: en cifras ajustadas por estacionalidad se reportó una contracción de 2.4 por ciento; dicho comportamiento fue provocado por el retroceso de (-3.8 por ciento) reportado por la industria y del sector servicios (-1.4). En conjunto, ambos sectores representan más de 93 por ciento de la economía nacional por lo que se puede considerar que se presentó una caída generalizada
.
En marzo pasado México comenzó a observar los efectos económicos del coronavirus, principalmente en la parte bursátil, la pérdida de valor del peso frente al dólar, la caída del precio del petróleo y el cierre de operaciones de algunas industrias que se vieron afectadas por la carencia de insumos intermedios que se producen en China, país que aplicó medidas de confinamiento que afectaron la cadena de proveeduría de las manufacturas globales.
No obstante, la actividad productiva se mantuvo hasta finales de marzo, cuando comenzó la etapa de confinamiento. Si bien algunas empresas y universidades empezaron a realizar ajustes desde el 15 de marzo, en realidad 90 por ciento de los sectores operaron con relativa normalidad hasta finales de ese mes.
Se puede establecer que el mensaje del producto interno bruto es claro: el coronavirus afectó significativamente una economía que llegó enferma a este momento histórico, aunque los mayores efectos adversos se verán en el segundo trimestre de 2020. Tal afirmación se desprende de las siguientes razones: tendencia negativa del ciclo económico; contracción histórica del precio del petróleo; salida de capitales a partir del segundo trimestre de 2019, y caída de ingresos por turismo e inversión extranjera directa.
Ante tal panorama urge un plan de reconstrucción nacional, bajo la lógica que el fortalecimiento integral del sistema productivo garantiza el bienestar social y la prosperidad del país.
Las rebanadas del pastel
El comandante Borolas se pone gallito y reta: si la fiscalía tiene pruebas de que he cometido algún delito, adelante, que proceda
. Que no coma ansias, porque en el juicio contra Genaro García Luna tarde que temprano Felipe Calderón tendrá que comparecer, y cuando ello suceda difícilmente saldrá bien librado.