La clavadista Paola Espinosa valora la pausa de actividad mundial por el coronavirus como la oportunidad de sensibilizarse en la convivencia total con su pequeña hija de tres años y con su madre, las tres en resguardo en Guadalajara, algo que antes no experimentaba, pues desde adolescente pasó la mayor parte del tiempo entrenando y viajando a competencias.

La campeona mundial de 2009, bronce en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y plata en Londres 2012, considera que no será fácil mantener el buen ritmo que llevaba hacia la cita de Tokio 2020, para la que calificó al país en la prueba de trampolín sincronizado junto con Melany Hernández, pero con el aplazamiento de la justa a 2021 podrá prepararse mejor, incluso ganar peso, y ponerle definitivamente su nombre a la plaza, lo que deberá suceder en un control interno.

El estar en casa lo he tomado de la mejor manera; fue un cambio de rutina drástico, pero lo estoy disfrutando muchísimo al lado de Ivana: estamos compartiendo todo el día juntas, me parece lo más bonito, hace mucho no pasaba por el tema de tener tan cerca los Juegos Olímpicos, compartió la atleta en entrevista.

Para mí fue recuperar todo ese tiempo. Ha sido bastante lindo desayunar, comer y cenar con ella; cantar, bailar, explotar mi creatividad para que no se aburra, que se sienta a gusto en casa, pa-ra que podamos pasarlo mucho más ameno. Ha sido muy bonito hasta el tema de seguir manteniéndome en forma, hacerlo con ella; tener esta pausa de no lanzarnos a la alberca y prepararnos en casa, hasta meterme a la cocina, cosa que nunca había hecho, dijo.

Y destacó: La verdad es que estoy muy contenta de poder disfrutar a mi mamá. Yo me salí de mi casa a los 11 años y hace mucho que no pasábamos tanto tiempo juntas. Compartir, recordar, me la estoy pasando increíble.

No obstante, la atleta que cumplirá 34 años en plena justa olímpica de Tokio 2021, admitió que el aplazamiento de los Juegos fue “un golpe muy duro, porque “Melany y yo llevábamos una racha súper buena; habíamos sido tercer lugar en la Copa del Mundo, estábamos dentro de las mejores en la Serie Mundial, acabábamos de ganar el nacional. Habíamos hecho la parte más difícil, que era ganar la plaza y el que a los jueces les gustara nuestro trabajo.

Cortar toda esta rachita va a ser difícil, pero estoy segura que estaremos en buena forma al regresar. Física y mentalmente me siento muy bien, tengo un muy buen equipo, anotó la atleta, quien se mantiene en contacto permanente con su entrenador, Iván Bautista, y el resto del grupo multidisciplinario: la doctora, preparador físico, sicólogo y nutrióloga.