19 de abril de 2020
• Número 151
• Suplemento Informativo de La Jornada
• Directora General: Carmen Lira Saade
• Director Fundador: Carlos Payán Velver
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De chile, de dulce y de manteca
Catherine Marielle Coordinadora del Grupo de Estudios Ambientales (GEA)
Miércoles 8 de abril de 2020, Ciudad de México
Mensaje dirigido a Marco Díaz León de parte de las compañeras y compañeros que conformamos el Mercado Alternativo de Tlalpan
Querido Marco:
A la distancia del encierro en nuestros hogares, mas no en el aislamiento, nos hemos enterado del final de tu colaboración en Radio Educación con el programa “Del Campo y de la Ciudad” que después de 31 años al aire, hoy se despide de los miles de radioescuchas que lo sintonizaban.
Más de tres décadas de trabajo en medios de comunicación en este país no son poca cosa, en especial por la permanente vocación de estar listo todas las semanas tras los micrófonos antes de despuntar el sol con el compromiso de abordar temas relacionados con la vida agraria, la importancia del trabajo campesino, las culturas originarias alrededor de los alimentos y la agroecología. Atravesando temas de política, música, tradición y costumbres desde una sólida trinchera de denuncia, pensamiento crítico y sentido de justicia con la convicción de que la relación entre lo urbano y lo rural es indisociable y por demás apremiante transformar.
Acompañado de un equipo igualmente comprometido, reconocemos tu desempeño como portavoz de esas voces del campo que difícilmente resuenan en la ciudad debido a su lejanía, en donde el ruido, la contaminación y el ajetreado estilo de vida nos impide escuchar a quienes con su trabajo diario nos alimentan, nos mantienen con vida.
Nos despedimos con tristeza y agradecimiento del programa que diste vida, que a su vez dio vida y albergó muchos otros proyectos: musicales, productivos, agrícolas, cooperativos, culturales, autónomos, ambientales, por mencionar algunos. No obstante, sabemos que tu trabajo siempre ha desbordado los límites de la cabina y que continuarás con tus convicciones e ideales desde otros espacios y otros tiempos.
Hoy cierras un ciclo, uno grande, difícil, que cala seguramente de manera profunda. Ciclo en que se despidieron algunos de tu lado, pero hoy, somos más quienes te acompañamos.
Un fuerte abrazo, ¡y salud!
Un 10 de abril de 1989 empezó el programa Del campo y de la ciudad, imaginado y diseñado por cinco buenos compañeros: Froylan Rascón, Alejandro López (q.e.p.d.), Ricardo Montejano, Antonio Noyola y Marco Díaz León, un día cada uno. Luego se integró Sergio Canales, quien falleció prematuramente. Marco hasta hoy, y desde hace años, es el único resistente de esta aventura hecha realidad social, histórica y largamente imprescindible…
En aquel entonces eran pocos los espacios abiertos a la participación directa de los pueblos con sus luchas y denuncias de tantos atropellos a lo largo y ancho del país. Claro, había antecedentes, siempre los hay: Abriendo surco fue cercano antecesor, en Derecho a la ciudad, después del temblor de 1985, Marco inició su camino y su pasión por la radio.
Del campo y de la ciudad abrió sus puertas a la gente del campo, y de un modo singular y constante a los pueblos originarios, en un país que aún no se miraba a sí mismo en el espejo del racismo y la exclusión hacia sus propias raíces… Años antes de su surgimiento en el escenario nacional, a contrapelo de las celebraciones del Encuentro de Dos Mundos en 1992, ya estaban en Del campo y de la ciudad, platicando sus dolores y su dignidad personajes creadores del Consejo 500 Años de Resistencia India, que precisamente en este programa se volvió Negra y Popular, en un magnífico esfuerzo por vincularnos a todos con esta resistencia y reivindicación histórica. Ahí compartieron personas que luego formarían el Congreso Nacional Indígena… Y por supuesto, a partir de enero de 1994 fue espacio acogedor para el profundo temblor social que significó el levantamiento zapatista que desde Chiapas sacudió a toda la sociedad mexicana, en un sentido de profunda solidaridad, contrarrestando el menosprecio que sigue vigente dos trecenas después…
Queda por escribirse la historia de este programa que terminó este 8 de abril, y con tantas comparticiones y aprendizajes nos ha colmado, tendiendo puentes reales entre el campo y la ciudad… También nos deleitó con las mejores músicas de todas las regiones y nos sensibilizó a recuperar los idiomas originarios, en especial el nahuatl con la lectura semanal del tonalamatl, y otras maneras de leer los calendarios. ¡Amo quinequi ce cintli cocoliztli, quema tonacayotl! Sin faltar nunca el humor: Y di no a los OGTs.
31 años de experiencias, luchas, heridas y propuestas que han ocupado esta ya famosa cabina de transmisión, llegando a los lugares más apartados de nuestro México y a otras tierras, primero con la onda corta y luego con el Internet. Sin olvidar los 30 aniversarios que nos reunieron festivamente cada año, alrededor de esta inolvidable fecha conmemorativa del asesinato del general Emiliano Zapata: ¡¡Zapata vive, la lucha sigue y sigue!!, compartiendo músicas, danzas, tamales, atoles, alegrías y amistades tejidas a lo largo de estas décadas…
En el Grupo de Estudios Ambientales (GEA) nos sentimos orgullosos de haber sido fieles acompañantes de este programa. Aquí hemos expresado nuestra visión crítica sobre el sistema capitalista que deshumaniza la humanidad, devora nuestra Tierra y nos conduce al colapso socioambiental y climático. Hemos compartido las luchas emprendidas con muchas organizaciones, movimientos sociales y científicos independientes y comprometidos con la sociedad, en defensa del maíz y la soberanía alimentaria, en contra de los transgénicos y otras amenazas a la vida, el agua, las semillas nativas, libres y campesinas, la comida sana… Con Marco hemos creado varias series radiofónicas en las que no sólo denunciamos que Está gritando la Tierra, sino también compartimos las experiencias que hemos impulsado y acompañado en diversas regiones del país… Abundan los testimonios recolectados en los últimos 26 años en las montañas guerrerenses, con verdaderas maestras y maestros campesinos, experimentadores de sabidurías milenarias, niños, niñas y jóvenes en busca del amor al terruño, sus vivencias hacia la restauración agroecológica, el buen manejo del ciclo agua-vida y la organización comunitaria del territorio. La nueva serie, apenas estrenada en 2019 en Del campo y de la ciudad, seguirá buscando otros caminos para socializar las pertinentes lecturas sobre el cambio climático y los testimonios de cómo se viven esos cambios en comunidades de Guerrero, Oaxaca y Ciudad de México; sus empeños por mejorar la resiliencia ante los embates de la crisis climática y fortalecer sus modos de vida campesina…
Con eso nos quedamos: el pensamiento crítico y las propuestas construidas desde abajo, que fortalecen la autonomía y la vida en los territorios, luces hoy más que nunca imprescindibles en estos tiempos oscuros y desconcertante incertidumbre.
Abrazamos en un profundo agradecimiento a Marco Díaz León por tanta tenacidad para sostener este barco contra vientos y mareas, soledades y tantas modalidades de presión en estas décadas, y siguió hasta hoy... 31 años de persistencia dándole vida a Del campo y de la ciudad, semana tras semana, cada día miércoles -más de 1600 emisiones-, repitiendo la hazaña de abrir el micrófono a nuestras luchas por el bien común y defender su propia libertad de expresión y su modo de hacer radio.
Que sea fuente de inspiración para muchas y muchos jóvenes, en cada lugar posible, que retomen en sus manos y voces la imprescindible tarea de comunicarnos, que la radio es de quienes la trabajan en el campo y en la ciudad… Larga vida a la comunicación desde abajo y desde todos los espacios posibles. •
En agradecimiento…
Treinta y un años nomás, se dice fácil, pero es toda una vida comunicando. Desde el 10 de abril de1989, muy de madrugada se oía la voz de nuestro amigo Marco Díaz León, conductor, productor, animador y musicalizador del programa “Del campo y de la ciudad” en Radio Educación. Sin faltar un amanecer, Marco nos compartió los problemas, los sentires, los sueños, las querencias, y también las canciones y las historias de los más desfavorecidos, de las más olvidadas del campo y de la ciudad; nos regaló variadísimos testimonios, historias siempre aderezadas con música. Muchas voces que oímos por más de tres décadas acercando el surco a la banqueta.
Público mañanero que escuchó noticias, reportajes y la voz de cientos de invitados y amigas que con música, noticias, reportajes y sobre todo biografías contadas por las y los protagonistas, nos regalaron narraciones emocionantes, cálidas y también terribles. Este programa siempre abierto al diálogo con las y los que no se oyen en otros espacios, fue un foro donde participaron muchos personajes memorables y grupos rebeldes. La voz de Marco, siempre comprometida y solidaria, nos comunicó una y otra y otra madrugada, esperanzadoras experiencias de vida.
La entrañable voz de Marco dejará de transmitir en el cumpleaños treinta y uno de este espacio radiofónico. Dejaremos de escuchar “Del campo y de la ciudad”, pero seguramente nos encontraremos en alguna brecha donde nuestros caminos se vuelvan a juntar.
Nuestro agradecimiento de corazón a Marco -que sirva como homenaje- por tantos años comunicando voces, presencias y escenarios que vamos a extrañar…
Firman:
La Campaña Sin Maíz no hay País; Circo Maya; Vía Orgánica; Mercado Alternativo Tlalpan (MAT); Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo (ANEC); Semillas de Vida; Centro de Derechos Humanos Fray Vitoria; Colectivo Zacahuitzco; Greenpeace México; Grupo de Estudios Ambientales (GEA); COMCAUSA; Asociación de Consumidores Orgánicos (ACO).
Lorena Paz Paredes, Armando Bartra y Rosario Cobo; Adelita San Vicente; Mercedes López; Malin Jönsson y Lucero Juambelz; Carlos Ventura.
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