Gobierno de facto de Bolivia culpa a Evo Morales
Sábado 18 de abril de 2020, p. 25
La Paz. Pobladores de Cochabamba, región cocalera de Bolivia y bastión del ex presidente Evo Morales, expulsaron de su territorio a policías que llegaron un día antes al lugar para ayudar en tareas de vigilancia por la pandemia del coronavirus, informaron este viernes las autoridades.
Los policías fueron obligados por una turba a abandonar la noche del jueves el poblado de Shinaota mientras les recordaban con insultos que en noviembre al menos cinco cocaleros murieron por la represión policial a las afueras de Cochabamba, en cuya jurisdicción se halla esta localidad.
El año pasado los policías se amotinaron para forzar la renuncia de Morales en medio de la convulsión social, tras unas elecciones que fueron consideradas fraudulentas y que daban un cuarto mandato al ex mandatario. Luego, los militares sugirieron públicamente a Evo Morales dimitir. Tras esos episodios políticos, desde noviembre, no había fuerza policial en varias poblaciones, entre ellas Shinaota.
El gobierno de facto de Bolivia había enviado el miércoles a 85 policías a Shinaota, Villa Tunari y Chimoré para hacer cumplir la cuarentena por el Covid-19.
Las fuerzas armadas están indignadas por la humillación que han sufrido nuestras camaradas de la policía
, dijo el ministro de Defensa, Fernando López, en conferencia conjunta con el titular de Gobierno (Interior), Arturo Murillo.
Murillo atribuyó el incidente a Morales, un hombre que se alimenta con la muerte, que se alimenta con la violencia. Vamos a hacer que todo el peso de la ley caiga sobre estos delincuentes políticos que lo único que están buscando es generar muertos a costa de su población
susceptible ante la emergencia sanitaria.
Bolivia reporta 465 contagiados por coronavirus y 31 muertos.