Viernes 10 de abril de 2020, p. 23
Playas y autopistas vacías, hoteles sin huéspedes, restaurantes sin comensales. Así de inédito fue el inicio del periodo vacacional de Semana Santa en el país, debido a la suspensión de la actividad turística para evitar la propagación de Covid-19. Los hoteles de gran turismo tuvieron una ocupación de apenas 0.3 por ciento, dijo la Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos. Entre el primero y 6 de abril el alojamiento en dichos puntos turísticos fue de 8.9 por ciento. La Federación Mexicana de Asociaciones Turísticas advirtió que cada uno de los eslabones de la cadena productiva del turismo está en peligro de romperse, por lo que instó al Ejecutivo federal a concentrar esfuerzos y refundar
el turismo.