Pese a la emergencia sanitaria por Covid-19 los pescadores, acuacultores y flotas pesqueras, siguen trabajando, pero toman medidas para evitar contagios. Por ejemplo, estas últimas siguen protocolos sanitarios en sus barcos, señaló a La Jornada, Citlali Gómez Lepe, presidenta del Consejo Mexicano de Promoción de los productos Pesqueros y Acuícolas (Comepesca).

La productora de trucha detalló que aunque las exportaciones de productos del mar han sido afectadas por el cierre de fronteras y las cancelaciones de vuelos, el cierre de hoteles, y las ventas a restaurantes colapsaron, porque muchos de esos negocios dejaron de operar, las ventas se están manteniendo, porque las compras en las tiendas de autoservicio se han elevado.

Ahora, la gente busca proteínas de mejor calidad, y los pescados y mariscos ayudan a reforzar el sistema inmunológico, incluso los restaurantes que llevan alimentos a domicilio, venden más pescados en los menús. Pero hacemos un llamado a la población a seguir consumiendo pescados y mariscos, no sólo en Cuaresma, sino todo el año, y los exhortamos a escoger el producto nacional.

Destacó que en el país se producen al año de 1.8 a dos millones de toneladas de pescados y mariscos, entre pesca y acuacultura, además el sector genera dos millones 300 mil empleos.

Expuso que en los supermercados ha aumentado la venta de atún y sardina enlatados, es el segundo producto más vendido en esta coyuntura sanitaria.

No podemos dejar de trabajar, de pagarle a la gente, pero tomamos las medidas de salud apropiadas a la contingencia, tenemos que abastecer a los mercados, 75 por ciento de los productos mexicanos se exportaban, y se ha reducido mucho.

Dijo que la mayoría de pescadores y acuacultores viven en zonas lejanas a las ciudades, en pueblitos, nos ayuda estar en comunidades aisladas para evitar hasta ahora contagios, pero se usan tapabocas y hay desinfección y las compañías han implementado prácticas de protección en barcos y plantas de proceso.