Jueves 9 de abril de 2020, p. 7
Madrid. España, el segundo país del orbe con mayor número de muertos por Covid-19, hasta ayer 14 mil 673, y con más infectados, 146 mil 690, podría estar viviendo un drama mucho peor si finalmente se confirman las denuncias de diversas autoridades locales y autonómicas de diversos partidos que advierten de la manipulación de las cifras reales de la epidemia.
La justicia ya abrió diligencias en algunas ciudades y autonomías, mientras el gobierno del presidente socialista Pedro Sánchez se comprometió en el Congreso de los Diputados a entregar un informe con los datos oficiales que se recaben durante los próximos días.
La cifra de fallecidos no para de aumentar y sólo en las últimas 24 horas fue de 757 personas, con lo que se rompió la supuesta tendencia a la baja augurada por el gobierno español.
Un ejemplo del desfase que hay entre las cifras que difunde el gobierno español como oficiales y las que tienen las autoridades locales es el de Madrid. Mientras desde el Ministerio de Sanidad se informó que en la región fallecieron 710 personas por coronavirus en asilos de ancianos, el gobierno autonómico entregó un informe, también oficial, que eleva esa cifra a 4 mil 260, es decir, 3 mil 550 personas más.
En Castilla-La Mancha, la cifra oficial de fallecidos es de 934, mientras los servicios funerarios públicos registran en sus informes más de mil 900: el triple de los contabilizados por el gobierno español.
Una razón del Ministerio de Sanidad para este desfase es que el protocolo de los países de la Unión Europea exige incluir en los datos oficiales sólo a fallecidos a los que se les haya practicado la prueba para confirmar el virus, algo que se ha hecho en los decesos en asilos de ancianos, pero en los hospitales no hay suficiente equipo para detectarlo.