Roma. El gobierno italiano anunció el cierre de sus puertos para el desembarco de migrantes rescatados en el Mediterráneo con el argumento de que la pandemia de coronavirus ha causado en este país el mayor número de muertos a escala mundial y por lo tanto no hay condiciones de aceptar a refugiados.

Alemania, por su parte, acogerá a 50 menores provenientes de los hacinados campos de refugiados en Grecia.

Los ministerios italianos de Transporte, Exteriores, Interior y Sanidad emitieron un comunicado en el cual afirmaron que los puertos italianos no aseguran los requisitos necesarios para la clasificación y la definición de lugar seguro para los rescates realizados por barcos de bandera extranjera.

La medida no afectará a los migrantes rescatados por embarcaciones italianas dentro del área de búsqueda y rescate que le corresponde al país en el Mediterráneo, o que lleguen por sus propios medios a costas italianas.

La decisión del gobierno italiano deja sin salida a los 150 migrantes rescatados el lunes por el barco Alan Kurdi, de la ONG alemana Sea Eye, y se considera la posibilidad de alojarlos en una embarcación de la Cruz Roja frente a las costas italianas para que cumplan un periodo de cuarentena antes de distribuirlos por varios países europeos.

En tanto, la medida adoptada por Berlín es un primer paso para aliviar la creciente preocupación de que los campos griegos de refugiados se conviertan en un incontrolable foco de infección por coronavirus.

En Grecia hay más de 40 mil solicitantes de asilo.