Jueves 9 de abril de 2020, p. 8
Madrid. El cineasta irlandés Lorcan Finnegan reflexiona sobre el aislamiento, el matrimonio, la indiferencia, la falta de comunicación y la mecánica del sistema capitalista en Vivarium, metáfora de tono entre el cine de ciencia ficción y suspenso, con la que lanza una alerta sobre los peligros de nuestro tiempo
, que guarda paralelismos con la situación actual por el coronavirus.
“Industrias como la de los influencers, que alardean en Instagram de su ropa nueva y haciendo que el resto se sientan inseguros, se han vuelto totalmente irrelevantes”, manifestó Finnegan, sobre la crisis por el Covid-19, durante una entrevista por el estreno en España de la cinta, dada a conocer en la pasada edición del Festival de Cannes.
Está protagonizada por Imogen Poots –galardonada con el premio a mejor actriz en Sitges– y Jesse Eisenberg, quienes dan vida a Gemma y Tom, joven pareja que está interesada en comprar. Un agente de ventas un tanto extraño los acompaña a visitar una urbanización donde todas las casas son idénticas.
Vivarium es una de las películas que la distribuidora A Contracorriente estrenó en línea debido al cierre de cines en España por la crisis del coronavirus. Lo hizo ayer a través de la aplicación salavirtualdecine.com y plataformas digitales.
Según Finnegan, es una reflexión sobre un tipo de vida que se vende y hacia el que se empuja a los jóvenes, y que se publicita especialmente a quienes se ven obligados a cumplirla e incluso a ampliarla. Desde diferentes perspectivas se observa el horror de todo esto. Es un aviso para ser conscientes
.
El cinesta irlandés dice que la cinta “refleja la vida de mucha gente. Hubo una época en que muchas personas compraron y los precios subieron, y se dio el crash, y muchos tuvieron que pasar toda la vida devolviendo unas casas que ya no valen lo que pagaron. Es como cavar una tumba, como en la película”, señaló.