La contingencia del Covid-19 ha elevado la demanda de agua potable entre 20 y 50 por ciento en el país, pero la recaudación del cobro del servicio ha caído 50 por ciento, con lo cual los organismos operadores del servicio están en riesgo de continuar con la dotación del líquido.

Esto es debido al alto costo de la energía eléctrica –representa 60 por ciento del costo de operación–, por lo que se requiere una tarifa preferencial de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en este periodo y que no se realicen cortes, señaló Arturo Palma, presidente de la Asociación Nacional de Empresas de Agua y Saneamiento (Aneas).

En videoconferencia de prensa de la Aneas y la Comisión Nacional del Agua, la directora, Blanca Jiménez, dijo que no se prevén mantenimientos en el sistema Cutzamala para no suspender el servicio y explicó que la demanda de agua se ha desplazado de los centros de trabajo a los hogares, por lo que se tienen que hacer ajustes técnicos.

Agregó que en zonas rurales, donde el bombeo de agua es muy caro, se contempla llevar gel antibacterial para atender la contingencia.

Apuntó que la prioridad es que los hospitales tengan suministro adecuado. También se revisa que en las plantas potabilizadoras se lleve a cabo la cloración requerida.

Pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador apoyo, porque la operación está en peligro.

Sobre los derechos de agua, pidió condonación temporal. Recordó que 70 por ciento de organismos que dan el servicio operan en números rojos. También dijo que presidentes municipales y gobernadores firman una carta para hacer esta petición al director de la CFE, Manuel Bartlett.