Surge la Liga de Balompié, antítesis de la FMF
ientras la Liga Mx de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) lleva años entre ensoñaciones y suspiros mirando hacia Estados Unidos, a la MLS y sus apetecibles dólares, la naciente Liga de Balompié Mexicana (LBM) está a punto de comerle el mandado en casa, donde para la afición es más fácil ver en el estadio Azteca a la NFL que al Tricolor. En tanto, el talento emergente es olímpicamente ignorado.
Hinchados de soberbia, los federativos han puesto cerrojos insalvables a los que consideran dueños chicos, empresarios que no merecen codearse con ellos. Se han erigido en un club elitista con pinceladas de mafia que no vela por el deporte, sino por sus propios intereses y ante el que la FIFA, atareada en guardar su propio mugrero bajo la alfombra, se hace de la vista gorda.
Entonces llegó el coronavirus y puso a cada uno en su lugar. Lo que quedó al desnudo es un mosaico variopinto que ya era bastante evidente: ni tan ricos, ni tan uniformes, ni tan unidos. Los de economía boyante aguardan sin mucha conmoción el paso del flagelo, son los realmente poderosos, encabezados por los regios Monterrey y Tigres, así como América.
Chivas y Atlas hace rato que sobreviven de forma artificial, haciendo malabares, poniendo y quitando parches a tientas y locas, sin que nada les dé el levantón esperado. Llegaron al extremo ridículo, pero vital, de quitar el descenso. Otros también atribulados se les adhirieron, mientras los estables toleran, porque saben que –al menos el Rebaño– es una pieza imprescindible en el rompecabezas.
Cruz Azul es el elemento morboso. Ha gastado millonadas haciendo justo lo que rehusaron empresas como Grupo Ángeles o Carso: metiendo dinero bueno al malo, quitando a la cementera con fachada de cooperativa para arrojarlo a ese barril sin fondo que es el equipo, donde el jerarca se aferra al timón, aunque esté recibiendo patadas y sombrerazos de su propia familia.
La FMF fue implacable con el polémico Fidel Kuri, ex dueño del Veracruz, quien no tuvo un colchón económico para garantizar el pago de sueldos, a él lo decapitó; ahora es otro el rasero. Los amigables, al parecer también sin reservas, corren a menguar los salarios de los futbolistas aprovechando la coyuntura de la pandemia e imitando a los europeos. El corte de caja para conocer el tamaño del desastre está pendiente.
En medio del ocio forzado y la incertidumbre, los directivos se han dado a la tarea de plantear escenarios hacia el desenlace del Clausura 2020. En realidad están a merced de los derroteros que tome la pandemia. Quienes realmente están trabajando a todo vapor y aguzando el ingenio, son los preparadores físicos, apelando al profesionalismo y disciplina de los jugadores.
A la Liga de Plata se le anunció un plan de extinción, en lo que parece el infeliz epílogo de una desastrosa novela, una invitación hacia la fuga. Tal panorama no dejó indiferentes a otros enamorados del futbol. En Guadalajara pusieron manos a la obra con la creación de la LBM, organizada por la Asociación Nacional de Balompié Mexicano (ANBM) que preside el ex futbolista Víctor Montiel Comparán.
Encontraron campo fértil, casi virgen en algunas plazas. En la baraja de la LBM pujan por un lugar en la naciente organización equipos como Villahermosa, Vallarta Riviera Nayarit, Real San José, Hidalgo FC, Club Deportivo Obregón o el Córdoba FC. Algunos acumulan experiencia: Chapulineros de Oaxaca, de José Antonio Ramos, contrató al técnico Ricardo Rayas y tiene un circuito semiprofesional en toda la entidad.
Falleció don Nacho Trelles, técnico del Tri en tres Mundiales, a quien le tocó recibir históricas goleadas en los primeros pasos hacia la internacionalización (el 8-0 ante Inglaterra en 1966), e inspiró en el periodista Manuel Seyde el mote de ratones verdes
. Su carácter e ingenio ácido lo hicieron un personaje único que ponía sal y pimienta a sus declaraciones, pero sobre todo hizo bicampeón al Cruz Azul. Descanse en paz.
Nada de alegría produce la idea de que Raúl Jiménez pase al Real Madrid, pinta como otra historia más de un mexicano que llega a calentar el banquillo; ojalá que el rumor, o la intención, quede en un simple halago por su buen desempeño en tierras inglesas. El que sí busca otros derroteros es Diego Lainez, hastiado de la inactividad en el Real Betis.