Disidentes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) demandaron al titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, Santiago Nieto Castillo, que investigue las millonarias liquidaciones que, tras la extinción de Luz y Fuerza del Centro, recibieron integrantes del comité central de esta organización sindical y sus familiares.

Desde el líder, el hermano de éste y otros

En el documento, el grupo Para Todos Todo señaló que el secretario general del SME, Martín Esparza, recibió una liquidación de cerca de 5 millones de pesos y su hermano, Francisco Esparza, más de 4 millones, éste último con 19 años de antigüedad. Mientras, trabajadores con 25 años de servicio ni al millón llegaron. El hijo del dirigente, añadieron, con 5 años de labor fue liquidado con más de un millón de pesos.

Exponen que el secretario del Trabajo del sindicato, Eduardo Bobadilla Zarza, recibió un finiquito de 5 millones 600 mil pesos. Su esposa Susana Mondragón, con sólo seis años de servicio recibió 5 millones de pesos. Y la hija de ambos, con apenas tres meses de trabajo recibió casi un millón de pesos.

También pidieron a Nieto Castillo que revise las rentas vitalicias que se otorga a los dirigentes y personas allegadas a ellos. Mario Benítez, agremiado del SME, señaló que en promedio por este concepto se dan 14 mil pesos, mientras que los consentidos del comité, más de 50 mil.

Rentas vitalicias a modo

Martín Esparza pactó con el gobierno anterior que los trabajadores que contaran con 23 años o más de servicio al momento del 11 de octubre de 2009, adquirieran la llamada renta vitalicia, que consiste en pagar con los mismos fondos de la liquidación una renta mensual de por vida, se señala.

Hay 14 casos de pagos de renta vitalicia por el mismo monto que resultan totalmente injustificables, pues difieren en tiempo de servicio, y salario, agregaron.