San Cristóbal de Las Casas, Chis., Los integrantes de los bienes comunales zona lacandona informaron que después de tres años de gestiones intercomunitarias para lograr la paz, promover la recuperación ecológica y dar certidumbre agraria a la zona, firmaron un acuerdo con el ejido Amador Hernández, municipio de Ocosingo.

Dijeron que el convenio, suscrito el 10 de marzo en Amador Hernández, posibilitará el cierre de 95 por ciento de los 434 kilómetros de su polígono territorial y la recuperación de más de 15 mil hectáreas.

En un comunicado especificaron que el acuerdo permitirá estrechar la colaboración para el cuidado de los territorios, orientando a la población a no causar incendios forestales, evitar la extracción de la flora y fauna, evitar la cacería, no permitir nuevas invasiones en las colindancias comunes, privilegiar el cuidado del ambiente y de la madre tierra; asimismo, fortalecer lazos de amistad, cultura, acuerdos comunitarios y respeto a creencias.

El pacto, explicaron, se suma a los 49 previos que han suscrito los comuneros lacandones con igual número de ejidos y comunidades que están en su perímetro territorial, para poner fin a los problemas sociales y agrarios que se originaron en noviembre de 1971, cuando el presidente Luis Echeverría emitió la resolución presidencial que dotó de 614 mil 321 hectáreas a 66 familias lacandonas.

Manifestaron que los acuerdos intercomunitarios se iniciaron en abril de 2008, después de que la asamblea de comuneros analizó y coincidió en que debía cambiar la estrategia gubernamental, influenciada por Natura y Ecosistemas Mexicanos, Asociación Civil, y que no debían permitir que se usara la figura de bienes comunales de la zona lacandona para continuar con los desalojos de los pueblos que habían ocupado sus tierras y en especial de la reserva de la biosfera de Montes Azules (Rebima).