Domingo 22 de marzo de 2020, p. 22
Vendedores ambulantes y semifijos, ancianos que trabajan de empacadores en centros comerciales, choferes del transporte público y obreros de la industria maquiladora de al menos cuatro estados enfrentan una situación económica complicada tras las medidas sanitarias decretadas por las autoridades para evitar la propagación del Covid-19.
Los afecta una brusca disminución de ventas y clientela, y por tanto de ganancias; otros, con la reducción del sueldo que devengan y a personas de la tercera edad que laboran de cerillos
y reciben propinas, los instruyeron a permanecer en sus casas mientras dura la contingencia.
En Morelia, Michoacán, vendedores ambulantes y semifijos que laboran en el centro histórico y mercados municipales afirmaron que hasta hace seis días en promedio vendían entre 200 y 300 pesos y a partir de la suspensión de clases y las medidas sanitarias, sólo obtienen 20 por ciento.
Por la escasez de clientes, han sido afectados los comerciantes de nopales, tortillas, quesos, huevo, entre otros productos del mercado de la colonia Vasco de Quiroga. Los vendedores de globos de las plazas Ocampo y Juárez comentaron que casi no hay ventas, pues hay pocos niños en las calles. Los conductores de transporte colectivo y taxistas de la capital michoacana comentaron que hay poco trabajo y les preocupa que la situación empeore en las próximas semanas.
El dirigente de la Ruta Gris de Morelia, Fernando Orozco, declaró que el pasaje se ha reducido en los últimos días hasta 70 por ciento.
En tanto, en tiendas departamentales como Soriana, Walmart, Bodega Aurrera de Morelia; Acapulco, Guerrero; Mazatlán, Sinaloa, se pidió a empacadores de la tercera edad que permanezcan en sus hogares, por ser la población más vulnerable al Covid-19. En algunos de los establecimientos se colocaron carteles pidiendo el apoyo de los clientes para realizar una donación y apoyar a los adultos mayores, pues su único ingreso son las propinas.
En Nuevo Laredo, Tamaulipas, la industria maquiladora APTIV (alambrados), suspenderá labores dos semanas, lapso en el que los trabajadores devengarán 50 por ciento de su salario.
La medida es resultado de la suspensión de actividades de las plantas armadoras en Estados Unidos, informó Luis Martínez López, secretario general del sindicato de maquiladoras. Estimó que en unas tres semanas las actividades en el sector se normalizarán.