Los megaproyectos del gobierno federal, como el corredor transístmico, el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas pasarán por Campeche, Tabasco, Quintana Roo y Veracruz, estados vulnerables a inundaciones por el aumento del nivel del mar que ocasiona el cambio climático. Sumado a ello, con la planta de Pemex el país creará otra fuente de generación de gases de efecto invernadero: se elevarían en 20 por ciento las emisiones de la paraestatal, de acuerdo con los consumos proyectados por las autoridades.

La sexta comunicación de cambio climático, coordinada por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (Inecc), indica que el incremento del nivel del mar, además de anegaciones, también afectaría a los ambientes costeros con la pérdida de humedales, erosión e intrusión de agua salada en los acuíferos. En caso de un incremento de dos metros en Tabasco 14 por ciento de su superficie sería cubierta por el mar, en Quintana Roo sería 11.9 y Campeche 9.5 por ciento. Si el aumento es menor, Tabasco, Campeche y la península de Yucatán seguirían siendo afectados.

La ruta del Tren Maya pasa por Campeche, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo. El corredor Transístmico iría de Coatzacoalcos, Veracruz, a Salina Cruz, Oaxaca, mientras que la refinería se encuentra en Dos Bocas, Tabasco. Ésta gene-rará 20 por ciento más emisiones de bióxido de carbono, metano y mercurio tan sólo de Pemex, de acuerdo con un estudio del Inecc.

Ante ello, Óscar Moctezuma, de la organización Naturalia, menciona en entrevista que sobre la refinería de Dos Bocas ya se ha advertido que el lugar no es adecuado para este proyecto, está muy expuesto a los huracanes. El Tren Maya está en una zona que se ha visto afectada por esos fenómenos, que han atravesado la península. Ante el cambio climático los últimos macizos forestales están expuestos a más incendios por la sequía y la mayor radiación solar, que hace más combustible la materia orgánica en las selvas, indicó.

Corredor Transístmico demandará mucha agua

Acerca del Corredor Transístmico, que irá de Coatzacoalcos a Salina Cruz hay que considerar en la región del istmo de Tehuantepec el agua para consumo humano y para todas las actividades que se llevarán a cabo, incluida la reconstrucción del tren del Istmo, la cual demandará diariamente unos 22 mil litros dijo, por su parte, Carlos Ávila, investigador de la Universidad Veracruzana. Si no logramos frenar, primero, y luego revertir el cambio climático, la falta de agua será un factor que provoque migraciones, disputas y hasta guerras.

Se comerán playas

Sobre el aumento del nivel de los océanos, dijo que en Coatzacoalcos, el mar que hace 10 años estaba ocho metros adentro, ahora está a cuatro metros. En 10 años se perderán tres o cuatro metros más de playa.

Mencionó que en el sureste del país hay altas reservas petroleras, y el Corredor servirá para sacar los combustibles. Hay que ver cuánto impactará en la cultura y los recursos naturales, si eso se traduce en quitar selvas, agroecosistemas, eso afecta en el calentamiento global. La contribución de emisiones de México se elevaría, advirtió.

Con la biodiversidad se pueden diversificar ecosistemas para obtener alimentos de alta calidad y restablecer relaciones ecológicas que se han ido destruyendo, al hacer más complejo un ecosistema se contribuye a disminuir el calentamiento global, por eso se deben recuperar relaciones tróficas como es el control de plagas, agregó