Con un historial de diferentes visitas a nuestro país el grupo catalán Elefantes está nuevamente por estos lares.

Julio Cascán, bajista, cuenta: Vinimos la primera vez en 2000, con Enrique Bunbury. Llegaban de hacer una gira de casi un año por España; en América llegaron a Estados Unidos y posteriormente recorrieron México. “Volvimos en 2001 y regresamos en 2016, pero desde entonces nos hemos impuesto venir una vez al año; primero, porque disfrutamos mucho de este país, luego, porque tenemos camino por recorrer.

Pero ya empezamos a conocer el gusto del público mexicano y tenemos la sensación que aquí nuestra música funciona, porque si te podemos dar una definición de cómo suena Elefantes, diremos que es una banda muy pasional y lo que nos sucede en la vida lo soltamos en nuestras canciones, porque son nuestro medio de expresión. Somos una banda muy emocional y el público mexicano es muy emocional también. Lo vivimos porque ya estuvimos en el Cosquín de Guadalajara; ahora nos invitan al Vive Latino el sábado a las 18 horas a la Carpa Intolerante. Tocaremos 40 minutos; no es mucho y probablemente decidamos qué tocar cuando veamos el espacio. Tenemos una serie de canciones con las que nos vamos a mover, pero todavía no decidimos cuáles, aunque todas nos las sabemos, que eso es mucho (risas).

Con un reportorio preparado con más de 20 canciones para tocar, Shuarma acota: En el Vive tocaremos menos de la mitad porque no es lo mismo estar en un festival a las tres de la tarde, que tocar en un teatro o en una sala de conciertos. Y como nunca hemos estado en el Vive Latino y ahora, que por fin tenemos el honor de ser invitados, elegiremos con mucho cuidado nuestras canciones.

Una oportunidad caída del cielo

La discografía de los de Barcelona inició en 1996 con el disco bautizado con el nombre de la banda: Elefantes, al que siguió El hombre pez, hasta llegar al más reciente, La primera luz del día. Actualmente el trío, formado por Jordi en la batería, Shuarma, en la voz y composición y Julio al bajo, ha incorporado dos guitarristas, Riky Froutchman y Alex Vivero.

Julio señala “2019 fue un año bastante movido. Cambios y cosas que te hacen reflexionar sobre la vida, y en 2020 cambiamos la formación original y también, estamos haciendo Antoine, una oportunidad que nos ha salido.

“Nosotros en 2020 queríamos parar un poco del circuito del rock y surgió este chance caído del cielo, pues nos propusieron que escribiéramos la música de Antoine, que es la vida de Antoine de Saint-Exupery, el autor de El Principito; en esta obra también actuamos y la banda toca en el escenario. Es algo muy especial que no queríamos pasar por alto.”

Sobre el tema del Vive Latino quienes sean testigos, el próximo sábado, de la presentación de Elefantes, escucharán una amalgama de sonidos que van del rock macizo y el pop, al ejecutado en el escena indie. Desde el principio hemos tenido un problema con la clasificación de lo que tocamos, pero, al final bebemos del rock, del pop, de la música francesa, del flamenco y empezamos a hacerlo de la música mexicana ahora que venimos acá más a menudo, apunta Jordi, a manera de invitación.