Un menor precio del petróleo, con impacto en las finanzas públicas, y una afectación en la industria manufacturera nacional, que depende de suministros llegados de China, son dos efectos inmediatos de la propagación del nuevo coronavirus en la economía mexicana, afirmaron analistas.

La situación no llega en el mejor momento para la economía nacional, que necesita un choque de confianza para reactivarse, opinó el área de análisis de CI Banco.

La propagación a más países –incluidos los primeros casos confirmados en México– de la epidemia ajustará a la baja las de por sí débiles perspectivas económicas para este año, añadió.

Actualmente la mayoría de los analistas del sector privado esperan un crecimiento en torno a uno por ciento para 2020, que podría reducirse a un rango de entre 0.9 y 0.7 por ciento, aseveró.

Las principales implicaciones del Covid-19 –como es conocido el nuevo virus– en México, hasta el momento, han sido en los mercados financieros, apuntó CI Banco. El tipo de cambio del peso con el dólar ha registrado una depreciación en los últimos cinco días hábiles de más de 5 por ciento, equivalente a casi un peso (de 18.8 a 19.8 unidades por billete verde, según la cotización para transacciones al mayoreo del Banco de México).

El índice principal de la Bolsa Mexicana perdió en la semana 7.7 por ciento, el peor resultado para un periodo comparable desde octubre de 2008.

Los inversionistas en general, ante la incertidumbre de este fenómeno, han corrido o desviado parte de sus portafolios a activos de menor riesgo, principalmente a dólares y oro. Esta volatilidad puede no haber alcanzado sus peores momentos, por lo cual esperamos en el corto plazo niveles más altos en el tipo de cambio, expuso.

A la par del efecto en los mercados financieros empiezan a asomarse ciertas implicaciones en la economía real, sobre todo en las cadenas de suministro desde China para varias empresas exportadoras, como en las industrias textil, electrónica y automotriz, y comercializadoras hacia el mercado interno, añadió.

Así, abundó, independientemente de los casos de contagio que se presenten en el país, las afectaciones a considerar provendrán de la caída del precio internacional del petróleo, que perjudicará los ingresos de Petróleos Mexicanos y, en general, las finanzas públicas. Este viernes el precio de la mezcla mexicana de exportación fue de 39.76 dólares por barril, el nivel más bajo desde junio de 2017. La referencia empleada para la elaboración del presupuesto federal de este año fue de 49 dólares por tonel.

Del total de ingresos públicos, poco más de una décima parte tiene origen en la actividad petrolera.

Mientras, una menor actividad económica global se traduciría en una baja de las exportaciones mexicanas, que afectará la industria manufacturera, de acuerdo con el análisis de CI Banco.

Sin embargo, hay un lado positivo de este fenómeno para la economía mexicana, dado que ante tantas contingencias de los últimos meses, incluida la guerra comercial entre Estados Unidos y China, diversas empresas globales manufactureras están contemplando diversificar su planta productiva en lugares diferentes a China. Así, México podría aprovechar esa coyuntura ofreciendo opciones para que se asienten en el país, planteó.