Nápoles/Pekín. La húngara Katinka Hosszú, el sudafricano Chad le Clos y la sueca Sarah Sjöström, tres nadadores de élite, entrenaron fuerte ayer durante dos horas como si no tuvieran la más mínima noción de que los Juegos Olímpicos de Tokio pudieran ser cancelados a causa del brote de coronavirus.

Fue hasta después de que los tres deportistas, ganadores de 11 medallas olímpicas en conjunto, salieron de la piscina cuando manifestaron, en entrevistas por separado, su seria preocupación sobre la suerte de la justa.

Para un deportista, lo mejor es sólo concentrarse en su preparación. Veo las noticias, pero en mi mente estoy preparada hasta el inicio de la justa. Entonces tengo que estar lista, dijo Hosszú, conocida como La dama de hierro.

Los organizadores de los Juegos Olímpicos y el gobierno japonés respondieron ayer a los comentarios del ex vicepresidente del Comité Olímpico Internacional, Dick Pound, quien señaló que las competiciones de 2020 podrían ser canceladas si el virus no es contenido.

Partimos con la premisa de que vamos a realizar los Olímpicos y Paralímpicos tal y como está previsto, dijo el director del comité ejecutivo de Tokio 2020, Toshiro Muto.

En tanto, más de medio centenar de maratones fueron cancelados en diversas regiones de China, debido a la propagación del Covid-19, informó la Administración General de Deportes de China.

La epidemia ha causado un impacto serio en los deportes, dijo el portavoz de la institución, Peng Weiyong. Hemos cancelado 50 justas de maratón y cerrado casi todos los gimnasios al aire libre, estadios e instituciones de entrenamientos, añadió Weiyong, quien reiteró que han debido aplazar, suspender o reubicar varios clasificatorios olímpicos.