Son armas de destrucción masiva
: Arreaza
Trump advierte que habrá más presión porque no le gusta nada
lo que sucede en el país sudamericano
Miércoles 26 de febrero de 2020, p. 23
Ginebra . El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, denunció ayer ante el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas las sanciones económicas de Estados Unidos, las cuales calificó de armas de destrucción masiva
, ya que obstaculizan el acceso a los alimentos y a las medicinas
. A todas luces es una acción criminal; son un arma para la coerción política
, sostuvo.
Las medidas coercitivas ocasionan severas heridas sociales a la población de Venezuela y afectan de manera negativa los derechos humanos
, aseguró Arreaza.
También afirmó que el presidente Nicolás Maduro “pidió colaboración al sistema de Naciones Unidas para romper el bloqueo utilizando el petróleo de Venezuela. Aunque al respecto, poco o más bien nada ha hecho el organismo mundial.
Venezuela acude, sí, a la Corte Penal Internacional para reivindicar el derecho internacional
, sostuvo el funcionario, y aseguró que ha llegado la hora de detener, de frenar la locura de la plutocracia estadunidense
.
La Casa Blanca aplica una batería de sanciones contra el gobierno de Maduro para forzarlo a abandonar el poder. Una de las medidas de presión es el respaldo de Washington al líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado
por medio centenar de países.
Hace unas semanas, Venezuela acudió a la Corte Penal Internacional para pedir que investigue como posibles crímenes de lesa humanidad las sanciones económicas de Estados Unidos. La institución tendrá que decidir si abre un expediente preliminar, al cual podría seguir una investigación formal.
En tanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió en que podría haber más sanciones contra el gobierno bolivariano y sus colaboradores, porque no le gusta nada
de lo que sucede en Venezuela.
Desde Nueva Delhi, donde está de gira, Trump advirtió: estamos observando Venezuela muy de cerca. Y no nos gusta nada lo que está pasando
. Añadió que lo que ocurre es muy triste porque la gente está pasando hambre
cuando hace sólo 50 años era el país más rico de América Latina. Y ahora no tienen agua, ni comida, ni medicamentos
.